Estación Preambular

Versión digital y actualizada del libro “Conciencia de Pasos” . W. Elphick D. Marzo año 2009

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PRIMERA EDICION: Ediciones SAN PABLO, Santiago Chile Inscripción N° 88.2411.

Edición 1.500 ejemplares . Impresor: Talleres Gráficos Pía Sociedad de San Pablo . Abril de 1994

SEGUNDA EDICION (DIGITAL) : CENACE (Centro Nacional de Calidad Educación Empresa).

Santiago de Chile, Marzo 2009. Versión Actualizada. La portada de esta edición digital corresponde a la Primera Edición, publicada por Ediciones San Pablo.

Se libera a esta editorial de toda responsabilidad por esta edición digital. Diseño portada: Mauricio Villarroel E.

VERSION TOTALMENTE GRATUITA. PUBLICACION SIN FINES DE LUCRO. Nuestro negocio es vender ideas, sueños, propuestas para mejorar la vida persona y social. ¿Quiere ser nuestro socio? ¿Cómo? Difundiendo, imprimiendo, regalando, estudiando en grupos esta 2ª Edición de Conciencia de Pasos Marzo 2009. Ayude a que el LIBRO sea LIBRE…


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WINSTON ELPHICK DEBlA

CONCIENCIA DE PASOS

(O de cómo reflexionar la existencia

sin caer en la euforia o en el suicidio)

CENACE – Centro Nacional de Calidad Educación Empresa. Segunda Edición (Digital) . Stgo de Chile 2009

© Winston H. Elphick D.

LO PUEDE REPRODUCIR CON TOTAL LIBERTAD citando la fuente. Nos interesa repartir estas ideas, pueden ser pequeñas semillas…

C E N A C E

Distribuyen: www.winstonelphick.cl - www.cenace.net


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INDICE ESTACION PREAMBULAR Prólogo Dr Sergio Peña y Lillo. I. Sin dedos frente al piano II. Estación Preambular. La inquietud de ser interrogante constante(o reflexiones a la partida de una ruta de humanización) 1. Tú eres hombre 2. ¿Dónde comienza mi historia? 3. ¿Quién me responderá lo que realmente soy? 4. Yo soy más 5. La conciencia de la persona humana 5.1. La conciencia en los dichos de la gente 5.2. Muchas definiciones para un mismo termino 5.3. Aquello que nos hace plenamente humanos 5.4. La conciencia se educa 5.5. Cuatro pasos para vivir el desarrollo de la conciencia personal 5.6. Los desafíos de una ciudad chata 6. Cada paso vive su propia experiencia Distintos pasos, el mismo hombre Un viejo muere aun en el recuerdo. Un anciano vive eternamente en su sabiduría i Ay de vosotros, los cojos! 6.1. Los pasos en los dichos de la gente 6.2. ¿Qué es un "paso"? 6.3. La riqueza conceptual de la palabra "paso"


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PROLOGO: DR. SERGIO PEÑA Y LILLO.

El libro que el lector tiene en sus manos es la obra de un educador, y constituye un bello y vigoroso llamado a la vida plena ya la felicidad a través de una percepción más profunda y más sabia de nosotros mismos. El texto - ingenioso y original - combina la prosa con el verso libre, pero sobre todo es un escrito poético por su contenido - que en logradas metáforas - nos va enseñando a trascender los prejuicios y condicionamientos que impiden el encuentro con esa verdad interior que es la secreta vocación del hombre y que - como dice el autor- nos permite "vivir lo profundo en la superficie de lo cotidiano ". No es un libro religioso, sino ético, pero – además de su inspiración cristiana - tiene ese halo sagrado de todas las obras de arte que son capaces de evocar los sentimientos más profundos y refinados y que, de este modo, embellecen el alma enriqueciendo la existencia. El método expositivo, si así puede llamarse, es de indagación y cuestionamiento, lo que le confiere un rasgo particularmente didáctico que nos induce a formularnos preguntas ya buscar respuestas que orienten nuestro autoconocimiento. En el libro se desenmascara "la conspiración del quietismo" y el texto termina siendo una lúcida denuncia de las " hipocresías " de nuestra cultura y de la mediocridad de las "metas planas " y de las "metas lastre " que detienen el crecimiento de la personalidad, desde el momento que sólo valoran lo más superficial y periférico de lo humano. Pero el libro no se queda en el espacio de la crítica y nos propone sucesivos pasos que permiten elaborar un proyecto de vida más generoso y trascendente. El propósito que vértebra el texto es la insinuación de un camino de vida auténtica,. de una vida que no miente y que no engaña y que, además, no se " apega " a nada, porque se sabe peregrina " en permanente viaje hacia otra parte ".


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EI autor nos contagia su entusiasmo y nos invita a "ponernos de pie" con coraje y con fe y a "tocar nuestro propio piano con dedos que no se ven ya escucharlo con sonidos que sólo se perciben con oídos nuevos ", asumiendo los vaivenes y azar de la vida con valentía y esperanza. Para Winston la verdad personal es el valor supremo, y el hombre debe sobrepasar todo lo ajeno y lo prendido para encontrarse con "aquello otro " que es la singularidad de nuestra esencia. Para el desarrollo de este autodevelamiento, propone el autor cuatro pasos decisivos: 1. Descubrir la propia individualidad y la verdad del mundo con ese asombro del niño ante lo nuevo y lo imprevisto. 2. Entender el sentido de los signos cotidianos que nos conducen a descubrir nuestro personal proyecto de vida. 3. Asumir la existencia aceptando lo real y lo inevitable. 4. Ascender en la vida que " es camino y escalada hacia una cumbre ". 5. Estos pasos serían necesarios para lograr la madurez y liberamos del "modelamiento" de las presiones y exigencias exteriores de la sociedad. Este libro - estoy cierto - hará mucho bien a quienes lo lean, particularmente a los jóvenes, permitiéndoles el incomparable gozo de descubrir el universo de la libertad y de la nobleza. No obstante, esta "pedagogía de la honestidad" también es necesaria para los adultos de nuestra época, que tenemos la responsabilidad de preparar hombres capaces de pensar por sí mismos y de enfrentar - de un modo creativo - los riesgos y desafíos impredecibles del tercer milenio. Sin embargo - como Winston - somos optimistas ya que, tal como él lo señala, "cada día es el inicio de la historia ". En realidad el hombre es un proyecto inacabado de sí mismo y, como dice el autor al término del texto: "al/in un día la historia nos demostrará lo que somos ". Sólo entonces el hombre podrá contemplar su verdadero rostro y percibir - bajo todas las mentiras y disfraces - Ia belleza conmovedora de su ser original.

Dr. Sergio Peña y Lillo Psiquiatra. Autor de diversos libros

Profesor de Psiquiatría de la Universidad de Chile


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I. SIN DEDOS FRENTE AL PIANO

Un día desperté sin dedos frente al piano, con la energía explotando en múltiples sinfonías y notas, pero sin encontrarles cauces para que se expresaran. . . sólo canales ciegos, puentes cortados, rutas inaccesibles . ¿Es que la vida se quedó muda ? ¿Se quedó silente ante sí misma? Un día la vida quebró la pancarta, silenció el grito, freno el kilómetro lanzado, renunció a seguir la rutina de la agenda y los compromisos. Quiso vivir en primera persona, quiso lograr la autoconciencia y al fin tomar la presidencia de la propia existencia. Un día la vida me invitó a ponerme de pie. Erguí mis músculos, fui tanteando la tierra, las arenas, las aguas, las aristas de las piedras. Me puse de pie, dejé las manos que me guiaban y las muletas que me sostenían... me hice dueño de mis pasos. Un día, frente al piano, aprendí a tocarlo con dedos que no se ven ya escucharlo con sonidos que sólo se perciben con oídos nuevos. Un día, usted, frente a su vida, puede optar por la ruta del que asumiendo lo común y corriente de su vida, logra obtener razones extraordinarias para animar sus pasos en el cada día que le toca vivir. Un día, cada hombre podrá vivir lo profundo en la superficie de lo cotidiano. Exigente meta y difícil ruta, pues quien decide vivir en coherencia humana no puede permanecer pasivo, termina rechazando la apatía y la pasividad, para coger el análisis y cuestionamiento personal y social. Esto puede ser un problema, pero sólo tras él se puede llegar a una solución. Es una ruta exigente y también lenta, porque es construida con materiales caros, no acepta soluciones temporales, ni materiales de desecho, requiere del tiempo personal. Quien elige la ruta que humaniza, no la puede prefabricar con recetas estandarizadas, requiere del trabajo personal del orfebre que toma cada gesto de su vida como parte de una obra irrepetible y eterna. Sólo a partir de la reflexión de cada hombre se logra solidificar la existencia humana. El inconsciente tocaría el piano, aun con los codos. . .


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ESTACION PREAMBULAR

LA INQUIETUD DE SER

INTERROGANTE CONSTANTE

(O reflexiones a la partida de una ruta de humanización)


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1. TU ERES HOMBRE

Tú eres Hombre, en piel femenina

o masculina, tú eres hombre, llamado a vivir con conciencia de sus pasos.

Hombre con conciencia,

que cultiva el arte y la ciencia

de la reflexión, del que escudriña desde el silencio,

su propia existencia.

Hombre con conciencia,

aun en una avenida de pies,

en un camino de pluralidades, en una sociedad

de diferentes, pero siempre abierto

al encuentro con la autopercepción

y el crecimiento en sí y desde sí.


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2. ¿DÓNDE COMIENZA MI HISTORIA ?

¿Dónde comienza mi historia ?

. ¿Acaso en lo eterno ? ¿En aquel silencio de Dios

que el cosmos VI ve y expresa

en sus galaxias?

¿Dónde mi yo empezó a tomar forma ?

¿Acaso en el nacer de mis padres?

¿ O en el susurro del encuentro celular

en el abrazo fecundo ?

¿Dónde mi yo inició el camino

de ser yo? ¿Será sólo

desde el seno de Berta mi mamá vieja,

que aporto su carne y su espíritu?

Algo propio de lo humano nos hace ser

todo inquietud, todo pregunta.

Tal vez se es más

Hombre - evolucionado gracias a las interrogantes,

a las ausencias, a las voces dichas a la noche

sin obtener respuestas; que por las pequeñas seguridades.

y las certezas que nos aquietan, nos instalan en pequeños

reinos de lo cierto, de lo habitual, de lo rutinario,


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de lo estático y acrítico.

3. ¿QUIÉN ME RESPONDERA LO QUE REALMENTE SOY?

Un día mis padres me dieron la vida y me dieron un nombre, me integraron a una familia. . .

Parte de mí es esto, ¡pero yo soy más que esto!


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¿QUIÉN ME RESPONDERA LO QUE REALMENTE SOY?

ENTRE TODOS LOS CHILENOS YO SOY UN NUMERO: OCHO MILLONES

SEISCIENTOS MIL, Y ALGO MAS...

PARTE DE MI ES ESTO, PERO YO SOY MAS QUE TODO ESTO!

SOY MAS QUE NUMEROS Y ESTADISTICAS…


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¿QUIÉN ME RESPONDERA LO QUE REALMENTE SOY?

Me han bautizado,

tengo una madrina de la que aún recuerdo sus afectos. Soy católico.

¡Parte de mí es esto, pero yo soy más que todo esto!


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4. YO SOY MAS...

Cuando tenemos que decir algo de lo que somos,

decimos mucho:

- soy profesor- (y me defino por lo que hago)

- soy hijo de Berta- (y me defino por mis antepasados )

- soy esposo de Verónica- (y me defino por mi estado civil)

- soy padre de Natalia - (y me defino por el fruto de nuestra paternidad)

- soy chileno- (y me defino por mi nacionalidad)

- soy católico - (Y me defino por mi religión)

- soy de "la católica" - (Y me defino por mi afición deportiva)

- soy demócrata- (y me defino por mi idea política)

- soy romántico- (y me defino por un rasgo de mi personalidad)

. . .decimos mucho


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y no decimos nada...

Yo soy más, más que el estudio de una profesión, más que una fusión gen ética, más que un estado civil, más que una nacionalidad, más que un nombre, más que un número y una firma. Todo esto me ha sido dado. Otros me dieron la vida. Otros me dieron un nombre un país, una familia. Un computador me asignó un número y una existencia en sus registros. Yo soy más. Mi identidad me demanda algo más. Mi existencia se hace real cuando soy más que lo dado. Mi identidad no se define sólo en base de lo heredado por el afecto o lo asignado por lo convencional. Mi identidad se calza de plenitud cuando soy capaz de asumir conscientemente lo dado, y de darme motivos nuevos, anclajes autogestados, para todo aquello que está por construirse en mi vida.


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5. LA CONCIENCIA DE LA PERSONA HUMANA

Existen teorías que explican al hombre sólo desde la perspectiva cientificista:

un conjunto de interacciones biológicas y químicas generando reacciones en el organismo,

que a su vez interactúa con otros organismos, con "otras químicas" o conjuntos celulares.

También existen otros científicos

que humildemente reconocen que la realidad humana los sobrepasa:

La vida humana tiene una dosis de misterio, que ninguna teoría ha logrado revelar .

La conciencia humana se encuentra

en la zona de este misterio: sabemos que actúa... pero no totalmente

por que actúa y como actúa. Sólo vemos sus frutos.

5.1. La conciencia en los dichos de la gente El término conciencia está presente en el lenguaje que maneja nuestro pueblo: - ¡Piénsalo en conciencia! - ¡Escucha la voz de tu conciencia! - ¿No te "remuerde" la conciencia? - Yo actué en conciencia. . . - Este tiene una conciencia laxa. - La conciencia es un juez interior. - Tu conciencia no te va a dejar tranquilo... - Su peor verdugo será su conciencia... - iNo mancharé mi conciencia! - Examinaré mi conciencia. . . - i Este es un inconsciente ! Bien entendida o no, el tema de la conciencia está presente en la educación cotidiana que se recibe en nuestros hogares. En ocasiones, nos referimos a la conciencia como aquella voz interior que juzga los actos, que nos hace ruborizar, hablándonos desde una tercera persona, cual intrusa que opina y fustiga nuestros actos. Quien percibe a la conciencia como una voz distinta a su reflexión personal, la inscribe en una dicotomía entre la persona y el cumplimiento de normas impuestas externamente. De alguna manera es una "voz" contra mi voz, mi actuar personal. Otros la entienden como la capacidad que cada persona tiene para percibir y asumir su realidad personal, analizando sus debilidades, fuerzas y potencialidades.


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5.2. Muchas definiciones para un mismo término

No existe una sola definición de lo que es la conciencia. Existen enfoques, énfasis sobre el mismo concepto:

- Para la neurofisiología, es un hecho que la conciencia depende de determinados mecanismos cerebrales, existiendo una relación estrecha entre funciones neurológicas y los niveles de conciencia. La conciencia está referida a la capacidad de sensibilización general de la persona. - Para la sicología (Ch. Wolff) será - la forma particular en que se dan vivencias, procesos síquicos que son experimentados inmediatamente por el sujeto, como percepciones, recuerdos, pensamientos, deseos, procesos de voluntad, etc. - Otros autores: Leibniz indica que "la conciencia es el contenido total del yo". Herbart la define como "la suma de todas las ideas efectivas, simultáneamente presentes". Algunos consideran conscientes todas las vivencias, otros sólo aceptan aquellas en las que el sujeto dirige su atención "conscientemente". - La filosofía indica que es la capacidad para percibir el entorno de la persona y su propia percepción del yo interior. - Para la teología moral no existe una definición de conciencia restringida al cumplimiento mecánico de principios o normas, sino que "es un inventar cada vez el modo con que el hombre responde a su cualidad de imagen de Dios, realizándose a sí mismo en la verdad" (D. Lanfranconi, 1971).

- El Concilio Vaticano II dice: "La conciencia es el núcleo más secreto y el sagrario del hombre, en que éste se sienta a solas con Dios, cuya voz resuena en el recinto más íntimo de aquella... Dios ha querido dejar al hombre en manos de su propia decisión para que así busque espontáneamente a su Creador y, adhiriéndose libremente a éste, alcance la plena y bienaventurada perfección"(Gaudiull et Spes, N°s.16-17) - Jesucristo no habla directamente de la conciencia. Esta palabra no aparece ni una sola vez en los Evangelios. Son los apóstoles quienes la empiezan a usar, en especial san Pablo, quien la escribe 21 veces en sus cartas. - El tema de la conciencia, Jesucristo lo asume hablando del "corazón", como el centro constitutivo del hombre, el lugar donde se gesta el "hombre nuevo", aquella capacidad para autogestar una nueva vida.


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5.3. Aquello que nos hace plenamente humanos La conciencia es un tema que se puede abordar desde lo prohibitivo, lo punitivo, desde la denuncia de aquel que actuó mal... sin embargo ella es el mayor signo de la alegría de llamarnos hombres y de pertenecer a una raza humana depositaria de un tesoro que ningún otro ser creado lo tiene: su conciencia personal. La conciencia es el sello por el cual podemos sentirnos pertenecientes al género humano, es el salto que en la evolución pegó un primate para empezar a ser un homínido capaz de preguntarse sobre lo que le rodeaba y sobre sí mismo. La conciencia existe no sólo por el hecho de que los sentidos capten las realidades externas a la persona; esto también lo puede realizar el animal: del medio capta el frío y busca refugio, de la cocina siente el ruido de ollas y salta dispuesto a recibir su comida. El ser humano no sólo se hace consciente por lo que perciben sus sentidos, sino principalmente por la acción dirigida voluntariamente, esto lo hace diferente a todos los animales. El animal es dirigido por su instinto, el hombre actúa de acuerdo a su libertad de conciencia. La conciencia no es "una voz" ajena a la persona. "La voz interior", como la entiende el común de la gente, es la propia voz de cada uno que va indicando las pistas para actuar humanamente. Soy todo yo cuando mi conciencia se pone en acto, soy todo yo en diálogo de crecimiento interior.


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5.4. La conciencia se educa: Separación y encuentro

Cada persona nace con su conciencia natural, básica, que lo hace capaz de obrar de acuerdo a su inteligencia y moralidad elemental. Esta conciencia nos permite reconocer nuestra responsabilidad en los actos que ejecutamos, ella testifica ante nosotros mismos, hace de espejo, nos devuelve lo hecho para observarlo, analizarlo, inferir responsabilidades y concluir una conducta consecuente. La educación tiene un papel clave en la formación de la conciencia humana. Cada ser humano construye su conciencia, ayudado en este proceso por el conjunto de experiencias culturales, por los patrones valóricos que su grupo social ha aquilatado y por su propio desarrollo personal. Nadie nace con la conciencia definitivamente formada. El hombre necesita de dos procesos para vivir la paternidad y presidencia de su conciencia: Un acto de separación Cada persona debe saberse único, con características que, así reunidas, no se dan en ningún otro ser humano. Tiene cualidades que debe desarrollar, defectos por superar, capacidades por descubrir . La separación no aísla, sólo reconoce la individualidad de cada uno, permite la introspección, el encuentro y conocimiento de la geografía interior, cada valle oscuro, cada cima brillante. Al analizarme separado del grupo, del ritmo social, aparece mi ritmo personal, las cualidades, las limitaciones. ¿Cuántos adultos llegan a la edad de madurez reconociendo o que los demás no los conocen profundamente o que tienen zonas oscuras para ellos mismos?


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Un acto de encuentro

La persona sola no puede desarrollarse. Una sociedad archipielágica está llamada a morir, las personas nos necesitamos mutuamente. Es en el encuentro con otros que nos podemos ir descubriendo, acogiendo, valorando, creciendo. Existen variados casos en el mundo de "niños - lobos", recién nacidos que por descuido o accidentes se han criado al cuidado de animales salvajes... algunos de los que han sobrevivido han sido estudiados por científicos. Un caso en Francia daba cuenta de que unos cazadores habían descubierto a un animal desnudo, corriendo en cuatro extremidades y tan ágil como el mejor mandril... al darle caza descubren que tiene rasgos humanos. Efectivamente era un hombre, que no alcanzó a desarrollar sus capacidades humanas, sólo sobrevivió gracias a sus instintos. No sabía hablar, no sabía reír... no tenía conciencia de que era un ser llamado a transformarse en Rey de su propia existencia. ¿Cómo saberlo si nadie se lo dijo? ¿ y cuántos van por nuestras calles rodando, aplastando, no sabiendo quiénes son los aplastados ni quiénes son ellos mismos? En los procesos de separación y encuentro, el hombre va descubriendo a otros y se va descubriendo gracias a la convivencia con ellos. En estos procesos la persona va consolidando una percepción de sí misma, una autoimagen, a fin de generar una equilibrada autoestima (ni sobrestimarse transformándose en un autosuficiente, un arrogante; ni, tampoco subestimarse llegando a rechazar su propia persona). Una conciencia justamente formada es capaz de situarse en un justo medio (ni laxitud, ni relajamiento; ni sobrestima, ni baja estima). Es el camino para que la persona logre la conciencia de sí misma: de su actual realidad y de sus proyecciones.


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En los procesos de separación y encuentro la persona va descubriendo sus capacidades para construir con otros, para generar proyectos comunes. Aprende la responsabilidad por la historia que nos es común. La persona logra la conciencia de que otros existen: de sus necesidades, de sus derechos, de la solidaridad de cuerpo. En los procesos de separación y encuentro la persona puede escuchar el llamado interior que resuena en ella. Es Dios que desea habitar su persona, que desea volver a compartir en aquel corazón que salió de su mano. La persona podrá así lograr la conciencia de que Dios existe y que lo invita a un proyecto grande: un Proyecto personal de vida y un Proyecto que busque el bien común.

5.5. Cuatro pasos para vivir el desarrollo de la conciencia personal

Es tarea de cada persona desarrollar la conciencia de pasos, aquella responsabilidad ante las decisiones personales, la claridad para optar de acuerdo a pautas de libertad y dignidad. Pero la conciencia personal debe tener referentes con los cuales pueda confrontarse. La conciencia personal necesita de apoyos objetivos: esto es la conciencia objetiva. La conciencia personal no crea la norma, sólo la interpreta, no es la fuente generadora de la verdad, pero ella puede y debe descubrir .la verdad, responder a la verdad, pero no es ella quien define la verdad ni las pautas morales. Por lo tanto, no basta con decir que se "actuó de acuerdo a la conciencia personal ", este presupuesto no exime de responsabilidad ética del acto, requiere que la persona pueda abrirse a parámetros orientadores, a normas objetivas que orientan nuestra convivencia en sociedad y que están definidas para preservar el bien común y la responsabilidad personal.


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La persona humana puede aprender a vivir con conciencia de pasos, para esto puede ayudar el ejercicio de estos cuatro pasos:

Descubrir, entender, asumir, ascender.

Descubrir Cada persona debe realizar el constante ejercicio de descubrir una múltiple verdad, sobre su propia interioridad: el sentido de las cosas, la naturaleza, los demás y Dios. Descubrir con la sencillez del niño que en su camino se alegra al conocer, cada día, algo nuevo. Sólo si logramos descubrir maravillados, podremos realmente descubrir. No basta con acumular conocimientos, adquirir nuevas fuentes bibliográficas o sociales... se necesita que lo pequeño se "deguste", se paladee, se admire. El mayor descubrimiento que el hombre puede hacer es su cercanía a la verdad, es ella quien lo abre a la verdad subjetiva del yo; a la verdad objetiva del consenso humano (la ley, la norma); a la verdad trascendente de Dios ya la verdad envolvente de la naturaleza.


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Entender Toda vida humana tiene signos que es preciso descifrar , pistas que están encadenadas, que se vinculan con la búsqueda del Proyecto Personal de Vida. Son los signos personales, aquellas señales que permitirán entender, al final de los días, la gran obra que es cada vida humana. Junto con descubrir el sentido global de mi vida, se necesita entender las acciones pequeñas, los signos personales cotidianos dentro del conjunto total de mi vida.

Asumir Si he descubierto la interioridad de mi ser, si logro entender las circunstancias en que se está construyendo mi proyecto personal de vida, debo ahora dar el paso crucial: asumir mi historia, con sus luces y sombras, con sus grises. Nada que no es asumido puede ser transformado, sólo la paciencia de quien ama lo que vive, aunque viva el dolor, logra transformar su realidad. No debemos ser peregrinos dolientes, mártires de la vida, tampoco podemos vivir con los ojos nublados por las lágrimas cuando vamos de viaje. Debemos asumir la realidad, tal cual es, con la conciencia de que es una realidad que deberemos transformar. ¡No a la pasividad que mata las esperanzas!, ¡sí al criterio de realismo que nos hace asumir el dolor, la pobreza, la violencia, para transformarlos!


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Ascender

Cuando el alpinista logra reducir los lastres, logra ascender a la última escalada. Al llegar no recordará lo duro del ascenso, ni lo peligroso de los riscos, no temblará su mirada cuando recuerde sus sufrimientos en el ascenso... simplemente reconocerá aquellos muchos sacrificios que le permitieron lograr la tan ansiada meta. Así también la persona humana en su vida puede vivir un constante ascenso: tal vez lo más largo en la vida serán las caminatas interiores, las luchas por vencer los errores personales. El momento del triunfo es breve, pero de una intensidad pocas veces vivida... el alpinista no puede sobrevivir permanentemente en la cumbre, más que definirlo como un hombre de cumbres, es un hombre de camino y de ascenso, a esto dedica sus mayores horas y sus mejores esfuerzos. El ascenso humano está animado por la voluntad personal, ella da impulso al acto, llama al esfuerzo y permite que la persona persevere en el logro de su desarrollo. Cada día debe ser un ascenso, una lucha por batir la marca anterior, marcas personales de esfuerzo por desarrollar las virtudes que puedo tener amordazadas. Cada día un lento ascenso en el servicio, en el esfuerzo, en la solidaridad, en la prudencia, en la justicia o mejor aun en la misericordia... ¿podremos decir un día que en esto hemos tocado cumbre?


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5.6. Los desafíos de una ciudad chata

El tema del ascenso se ha ido silenciando en nuestras ciudades. Y poco a poco han ido apareciendo pancartas, voces, chapitas, poleras, llaveros que anunciaban que algo nuevo estaba surgiendo: ¡Han muerto las utopías!, ¡han muerto los socialismos y los comunismos reales! , ¡hoy los hippies son prósperos comerciantes y burgueses! , ¡la fe pertenece a pequeños grupos sectarios o de tercera edad!, ¡los ideales no sirven, vale lo medible, lo usable! ¡Viva los proyectos concretos!, ¡viva el pragmatismo!, ¡viva la tolerancia llevada hasta la apatía por los principios mas profundos!, ¡viva la mezcla de verdades y de mentiras! ¡Vivimos el tiempo de la libertad!, ¡que cada cual haga lo que desee, sin molestar a su vecino!, ¡todo en esta vida vale para ser feliz! ¡Vivamos el momento, gocemos el hoy!, ¡el mañana no existe, sólo somos presente! ¡Hoy todo es relativo, transitorio, desechable, acabamos con las verdades permanentes, lo duradero ha muerto! Y empezamos a vivir una cultura de metas planas, de fácil y rápido acceso. De lo dicho, breves ejemplos: - Vivimos el tiempo de lo DADO. Todo ya está hecho, la comodidad, el confort de la tecnología, nos llama a adormecernos frente a los modernos equipos que cubren nuestros hogares. ¡Se nos facilitan tanto las cosas!, que hacemos lo mismo con nuestros hijos, les damos todo hecho, no les exigimos su aporte en lo que nos piden. Pocos son los padres que descubren con los hijos metas a largo plazo, desafíos que en conjunto se resolverán... se priorizan respuestas a corto plazo: notas y el esperado puntaje de la PAA, un signo de que como padres "ya hemos cumplido con nuestra misión".


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- Hoy los hijos ya no se ganan la mesada, pasó a ser un derecho que lo pueden retirar individualmente del cajero automático. - La sexualidad no se orienta hacia propuestas. La frase de la Conferencia Episcopal Española: "Propóntelo, propónselo", pasó a absoluta derrota frente al "Póntelo, pónselo" de aquellos que ofrecían la facilidad de los preservativos a los jóvenes españoles. En Chile se les invita a "que se cuiden" de los efectos de una sexualidad que, a tos IS años, ya se liberó de estas "trancas moralistas" de los adultos. - Pocos se atreven a tocar el tema de la espera sexual en pololos adolescentes. Quien habla de la virginidad, hoy es un retrógrado, se elige la vía rápida para un problema que está en lo profundo del espíritu humano. El preservativo no educa la concepción del amor - donación, del amor - responsabilidad, del amor que espera porque ama. - Los padres pierden capacidad de orientar a sus hijos y piden auxilio a los profesores que entreguen los hábitos que ellos no han logrado formar. . . sin embargo, adaptando el dicho de la Universidad de Salamanca, "lo que la familia no da, el colegio no lo puede prestar..."

- La familia como primera escuela, es sólo un eslogan. - No hay tiempo para sentarse juntos, los adultos debemos producir recursos, los jóvenes deben producir buenas calificaciones. - Unos tirados por el trabajo, los otros por el colegio y el preuniversitario. ¿Quién educa en la familia? , ¿quién se interesa por ser educado por su familia?

En una encuesta a 1.500 jóvenes realizada por Aleph INJ el año 1991, se indica que más del 40% de los jóvenes conversa los temas más íntimos en primer lugar con sus parejas y amigos, y sólo un 15% lo hace con sus familias... con sus profesores, sólo un 3%. - El mensaje del "prohibido prohibir" aún se repite, incorporándose grados crecientes y agresivos de permisividad. - Todo se hace valer para el logro de los objetivos, se derriban los marcos, las normas se desafían. - En nuestras calles salen jovencitos manejando el auto de papá en condiciones desconocidas por él, ¿cuántas muertes se han ocasionado por sus irresponsabilidades ?


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En nuestras ciudades chatas,

aún existen personas

dispuestas a buscar cumbres

de ascenso interior. - Los padres han visto reducida su capacidad de educadores y orientadores. Buscan compensar sus ausencias con la reducción de normas, temen gastar el poco tiempo junto a sus hijos con amonestaciones o directrices, temen perder la simpatía de los hijos o 'imponerse' sobre sus libertades. - Mayorías de educadores usan variadas formas para "ganarse" al alumno y entran en sus territorios, con su lenguaje, sus motivaciones, en ocasiones se desdibuja el educador y se transforma en un simple acompañante. . . ¿acaso el profesor temerá ser 'exonerado' del grupo o no se tienen propuestas que sirvan de orientación para los jóvenes o estamos frente al nacimiento de una pedagogía de la neutralidad ? Hoy, a nuestra ciudad la hemos hermoseado, renovamos su rostro, pero el smog asfixia el ánimo, no vemos el espacio, nos faltan cumbres, caminos hacia ideales que exijan entrega y perseverancia. Hemos aplanado las alturas a los jóvenes; por facilitar su desarrollo hemos simplificado el camino y reducido el esfuerzo. Hoy, nosotros, ciudadanos de una ciudad chata, debemos buscar las cumbres, apuntar hacia lugares altos, éticamente altos, debemos dirigir la mirada hacia formas de desarrollo de la persona, animando al esfuerzo, al trabajo, a la disciplina personal, a la renuncia de buscar siempre satisfacciones inmediatas. Pero, aun en nuestra ciudad chata, existen hombres que se preparan para nuevos vuelos, que no han sido vencidos por la compra y venta de verdades, la libre competencia de los valores no ha debilitado la seguridad de sus principios.

Hoy, nuestras ciudades tienen potenciales alpinistas, que no siempre encuentran cumbres. A ellos les debemos cumbres. Es urgente que los padres y los educadores nos transformemos en descubridores de cumbres, en primer lugar en nuestra geografía interior, y luego animemos a los jóvenes a descubrir la inmensa variedad de alturas que se encuentran en sus propias vidas. Las cumbres no están fuera de nosotros, el smog no puede contaminar para siempre el ánimo del hombre, podemos ascender a nuestras propias cumbres interiores.


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6. CADA PASO VIVE SU PROPIA EXPERIENCIA Distintos pasos, el mismo hombre. Cada paso calza su tipo de zapato, Vive su propia experiencia, goza un sabor particular . Los del niño: descuidados, albos de ingenuidad. Siempre guiados, inconscientes de ruta. Los del joven: críticos del camino, reticentes de los guías, plenos de motricidad. Los del adulto: suaves de colinas, de rutas conocidas, ajenos a la aventura , una oda a la vida equilibrada. En todos los pasos se cuece la historia que cocina a los hombres: personas críticas o pasivas, hombres señores o esclavos dependiendo de la especialidad del Chef. En todos los pasos nace un niño, crece un joven, se aquieta un adulto, muere un viejo, resucita un anciano. Cada paso acuña eslabón a eslabón la historia de un hombre.


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Un viejo muere aun en el recuerdo. Un anciano vive eternamente en su sabiduría. Más tarde, ya en la noche de nuestros días, los pasos invitan a un tercer pie, un apoyo, una defensa, y ante el hombre la vida se bifurca: o envejecer o ancianizar ... lo primero detiene, limita ... entierra; lo segundo proyecta, comparte el fruto de los sueños. En todos, un hombre se encuentra, se descubre y se agiganta. Como torre en el tiempo va instaurando, rompiendo, sembrando, viviendo la conciencia de ser, como requisito para luego hacer . ¡Ay de vosotros, los cojos! Hay entre nosotros pobres cojos, involuntarios. A ellos les inyectaron la cojera. Un día el camino les miró romper sus pasos, a partir de relaciones violentas, de rupturas, de golpes. Fracturaron sus pasos, les pusieron cortapisas a sus sueños, rompiendo su ritmo y sus metas ... Ellos están perdonados : cojean no queriéndolo, son esclavos y no señores. Hay otros cojos por iniciativa propia. Por opción personal Acogieron la cojera como una forma de sobrevivencia. Aprendieron en las componendas a renunciar al ritmo de sus conciencias.


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Renunciaron a la opinión, no cuestionaron la mentira, y se arrullaron en brazos del poderoso. ¡Ay de vosotros, los cojos mentirosos!, los que fingían cojear . Aquellos que por falsa solidaridad tropezaban junto al equivocado. U n día se mimetizaron, y el ritmo y la fractura envolvieron no sólo sus huesos y músculos, sino su vida entera . ¡Ay de vosotros, cojos de pensamiento y de acciones!, los del gesto ritualizado, aquellos timoratos, híbridos, temerosos de opciones. ¡Ay de vosotros, cojos por componendas, por falsas solidaridades, por seducción del poderoso!, los del amor vendido y pagado, aquellos arlequines sudorosos inventando la palabra aduladora. i A y de vosotros , cojos que no luchando, acogieron el tropiezo y el error como una forma de vida!


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6.1. Los pasos en los dichos de la gente

El término "paso" encierra una amplia cobertura de definiciones y aplicaciones en el lenguaje que cotidianamente nos relaciona: - Estamos a dos pasos. - Es necesario alargar el paso. - Tú andas en malos pasos. - Vas a paso de tortuga. - Este va a pasos agigantados. - Le cerró el paso. - Pobre, dio un paso en falso. - Más vale echar paso atrás. - Sólo marcamos el paso. - Va paso a paso. - De pronto le salió al paso. - Tienes tus pasos contados. - Volvió sobre sus pasos. - Vamos sólo de paso. - ¡Paso!

6.2. ¿Qué es un "paso"? - Un movimiento de un pie para trasladarse de un lugar a otro. - El espacio entre los pies. - Acción de pasar de un lugar a otro. - Diligencia que se hace para obtener algún

beneficio. - Estampa o huella que queda impresa al andar. - Licencia para pasar sin molestia por algún lugar . - Trance de muerte o conflicto grave. - Cada movimiento que se realiza en los bailes. - Pieza dramática breve, por ejemplo, "Las aceitunas" de Lope de Rueda. - Vado de los ríos, desfiladero, collado entre dos montañas. - Paso a nivel, como el sitio en que un ferrocarril se cruza con el camino. Buscando en el diccionario podemos recoger que "paso " es "la locomoción del cuerpo humano que se efectúa por el apoyo alternante de uno y otro pie que tiene a veces períodos de suspensión en que cesa el contacto con el suelo. El paso corresponde a actos elementales de traslación y de oscilación ". (Enciclopedia Universal Ilustrada Espasa - Calpe).


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6.3. La riqueza conceptual de la palabra "paso"

La palabra "paso" tiene un rico significado. Encierra el principio de evolución, de camino, de ascenso. Sólo la mujer y el hombre pueden lograr pasos con sentido, sólo ellos pueden gritar en la historia que sus pasos no son en falso, sino que son parte de la constante evolución en la que participamos como género humano. Desde que el hombre nace, tiende a ponerse de pie y caminar. Su primera lucha y su primera conquista será demostrar ante sus padres y abuelos que ya camina, aun a tropiezos, pero camina. Sobre la rica significación que tiene esta palabra, podemos recordar aquella, frase de Neil Armstrong dicha el 20 de julio de 1969, cuando el hombre pisó la luna por primera vez: "Este es un pequeño paso para el hombre y un gran paso para la humanidad". El paso se transformó, así, en la idea que resume todo el avance científico tecnológico que¡ los grandes países trabajaron durante decenios en la conquista espacial. Quien camina no está muerto, ni avasallado por el cansancio, quien camina no se dejó seducir por la sombra del camino, quien camina tomó la decisión de continuar su evolución y desarrollo no por el vértigo de la carrera, sino por su conciencia de pertenecer a una raza humana capaz de restaurar sus propios errores y de construir sobre ellos una convivencia más justa y fraterna. Quien camina realiza dos movimientos: de traslación, es decir, va de un estado a otro, recorre una ruta que lo lleva hacia alguna meta, hacia algún objetivo; el otro movimiento es de oscilación, este constante vaivén, el constante ejercicio de volver sobre sí mismo y desde sí leer la historia que construyen sus pasos. Avanzar y centrarse, evolucionar y volver sobre sí, son las dos condiciones para un paso con peso humano.


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