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8/8/2019 Expedientes de regulacin de empleo y accin sindical
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Expedientes de regulacinde empleo y accin sindical
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IndiceIntroduccin ...................................................................................................................................... 51.- Contexto socioeconmico ...................................................................................................... 6
1.1.-Claves sobre la situacin.......................................................................................................................................6
1.2.- Los objetivos de las lites econmicas en este contexto ......................................................................7
1.3.- Medidas empresariales .......................................................................................................................................8
1.4.- Posicin de los sindicatos ..................................................................................................................................8
2.- Tramitacin de los expedientes de regulacin de empleo ....................................10
2.1.- Aspectos bsicos a considerar.........................................................................................................................10
2.2.- Expedientes de Regulacin de Empleo que responden a situaciones diferentes ...................10
3.- Actuacin ante los expedientes de regulacin de empleo ....................................13
3.1.- Posicin de LAB.......................................................................................................................................................13
3.2.- Movilizacin ...........................................................................................................................................................13
3.3.- Interpelar a las instituciones...........................................................................................................................14
3.4.- Finalizacin del expediente ............................................................................................................................14
4.- Participacin de las diferentes estructuras del Sindicato......................................
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5.- Conclusiones ............................................................................................................................... 17
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Koadern
o
sindikalakAbarrekoak
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Introduccin
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Los Expedientes de Regulacin de Empleo (en adelante EREs), forman parte de
los contenidos propios de la negociacin colectiva. La misma regulacin legal
establece la obligatoriedad de abrir un proceso de consultas con la representa-
cin sindical de la empresa, a la que deber entregar toda la informacin nece-
saria para justificar las medidas que la empresa propone en el expediente. Las
medidas a proponer en un expediente pueden consistir: en la suspensin de las
relaciones laborales, en la modificacin sustancial de las condiciones de trabajo
y en el peor de los casos en despidos.
Desde el principio del proceso negociador del expediente hay que marcar posi-ciones claras y no caer como se explicar seguidamente en la filosofa envene-
nada que plantean la gran mayora de las empresas. En nombre de la actual situa-
cin de crisis nos plantean un panorama de amenazas, catastrofismo, chantajes...
para que aceptemos el recorte de derechos laborales como medidas urgentes
de choque para salvar a la empresa. Lo cierto es que asistimos a una utilizacin
interesada de los expedientes de regulacin de empleo, convertidos as en la
actual situacin en un instrumento mas a favor de los intereses de la patronal para
introducir la flexibilidad de las condiciones laborales.
La representacin sindical de LAB debe en primer lugar, superar este primer
pulso con firmeza y evitar caer en el terreno de juego al que intentar llevarnosla empresa: el carcter inevitable de las medidas y limitacin del papel de la
representacin sindical a negociar las consecuencias y el mal menor.
Este cuaderno sindical pretende ser una herramienta til para la representacin
sindical de LAB en los centros de trabajo, con el objetivo de ayudar a hacer fren-
te a los EREs con una accin sindical coherente, lejos por tanto, de aceptar situa-
ciones como inevitables, ni de dar por perdida ninguna lucha.
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No podemos hablar sobre los Expedien-
tes de Regulacin de Empleo (ERE) sin
realizar previamente una reflexin sobre
la situacin socioeconmica actual. La
utilizacin de los expedientes de regula-
cin se ha incrementado enormemente
en el actual contexto de crisis. Los ERE
son instrumentos empresariales, una
herramienta que les ha otorgado la legis-
lacin por encima de los derechos de lasy los trabajadores. Pero no es la nica
herramienta que les ha regalado. Este
cuaderno sindical pretende situar todas
esas herramientas en una lectura comn.
1.1. Claves sobre la situa-
cin socioeconmica
El reparto desigual de la riqueza y su
concentracin en cada vez menos
manos, esta en el origen de la actual
situacin de crisis econmica. Esta situa-
cin no es consecuencia slo de la actua-
cin de unos cuantos irresponsables que
han saltado las normas. Hay responsabili-
dades polticas que han fomentado con
sus polticas monetarias, sociolaborales y
fiscales que nos encontremos en la actual
situacin. Los gobiernos han primado la
acumulacin de capital cada vez en
menos manos y como se ha dicho, han
producido una profunda brecha en elreparto de la riqueza.
Hay ingentes cantidades de beneficios
acumulados en muy pocas manos que
han sido utilizados para el desarrollo de
inversiones especulativas. Han generado
una crisis de sobre acumulacin que no
puede ser compensada por la escasa
demanda consecuencia del creciente
endeudamiento familiar, la precariedad
laboral, la especulacin inmobiliaria y la
reduccin de la proteccin social.
La crisis ha llegado al mercado laboral.
La disminucin del consumo ha genera-
do una bajada en la demanda de deter-
minados productos y por lo tanto en su
produccin. Adems las entidades finan-
cieras, lejos de poner el capital acumula-
do al servicio de las necesidades que
genera la crisis, no facilitan crditos ni
lneas de descuento.
Esta situacin ha tenido consecuencias
en los mrgenes de beneficio de algunos
empresarios, reduciendo dichos mrge-nes. Lo que pone sobre la mesa la cues-
tin de quin pagar esa prdida de
mrgenes, los empresarios o las y los tra-
bajadores. En este sentido se adoptan
medidas para que sea la clase trabajado-
ra quien sufra las consecuencias, bien
mediante destruccin de empleo o
mediante la adopcin de medidas que
flexibilizan y precarizan an ms las rela-
ciones laborales.
A ello debemos aadir la lectura de las
instituciones pblicas y de las elites
econmicas:
- No se pone en cuestin el modelo.
- Se necesitan medidas coyunturales para
mantener el modelo. Todos tenemos
que pagar sus ansias de enriqueci-
miento.
- Las medidas adoptadas valdrn para
profundizar en el modelo.
Por lo tanto, la actual situacin generalpuede definirse de esta forma:
- La unidad existente entre las institu-
ciones pblicas y las elites econmi-
cas obliga a la clase trabajadora a
situarse en una posicin defensiva. Esa
es la base de la extensin del modelo
precario en los ltimos diez aos.
- En esta fase, tomarn medidas contra-
rias a los derechos de los trabajadores
y trabajadoras para mantener sus
ganancias. Para que las ganancias sigan
al mismo nivel.-Alarmismopara justificar ante la socie-
dad la necesidad de dejar el dinero
pblico en manos privadas. Para ello es
muy importante el papel de la prensa yKoadern
o
sindikalakAbarrekoak
1. Contexto socioeconmico
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de la televisin (por lo general, los dueos de los grandes medios y de los ban-
cos suelen ser los mismos, as que tienen los mismos intereses y objetivos).
- Necesidad de alinear a la clase trabajadora.Y aqu debe analizarse el papel
de liderazgo que un sindicato como LAB debe jugar.
1.2. Los objetivos de las elites econmicas en este
contexto
En general,el objetivo de las elites econmicas es claro: profundizar en el mode-
lo y para ello desarrollar el modelo de vida precario, igual que en los ltimos diez
aos. En esta fase de cada del margen de ganancia, su objetivo es que esa cada
la paguen las y los trabajadores (la misma filosofa: privatizar las ganancias y
hacer que la prdida de margen la pague la clase trabajadora). Es decir, con-
vertir la situacin coyuntural negativa en oportunidad favorable a sus intere-
ses. Su margen de ganancia se mantendr en la medida en que consigan cam-
bios estructurales por encima de nuestros derechos.
Para ello, pretendern profundizar en la vulneracin de los derechos laborales y
la precariedad laboral existente mediante:
- Postura agresiva en la negociacin colectiva.En principio,el miedo social es
evidente.Y tambin es evidente con qu objetivo se crea ese miedo: para que
las y los trabajadores renuncien a los derechos que les corresponden como
colectivo, en favor de los intereses empresariales. Lo que ahora consiga la
patronal, tendr consecuencias definitivas en el futuro de los derechos de las
y los trabajadores. Por ello en la negociacin colectiva intentarn:
- No mejorar las condiciones.
- Necesidad de moderar los salarios.
- Inventar subcategoras (al acceder a la empresa,para determinadas funciones).
- Traspasar a los trabajadores y trabajadoras la responsabilidad de las ganan-
cias e inversiones. Ellos deben decir cunto quieren ganar y nosotros y
nosotras debemos garantizarlo, para invertir una parte de ello.
- Desaparicin del contrato de relevo, amortizando empleos fijos mediante
prejubilaciones.
- Reducir lo ms posible las plantillas. Muy poca plantilla a su cargo. Luego,
cuando se incrementa el volumen de trabajo utilizar formulas como:
- Las subcontrataciones (limpieza,comedor, procesos industriales completos)
- La subcontratacin interna (fundar otra empresa, con otras condiciones, en elmismo sitio o en otro).
- La deslocalizacin, traer de fuera una parte de la produccin, multiplicando
los mrgenes de ganancia.
- Llenar los centros de trabajo de contratos temporales.A pesar de que la mayo-
ra cubran puestos de trabajo estructurales.
Por lo tanto:
- Profundizar en la divisin de las y los trabajadores, y a travs de ello extender
el empleo precario.
- De esa manera, mantener su tasa de ganancia en esta fase y profundizar en las
posiciones agresivas, para conseguir mayores beneficios en pocas de creci-
miento.- Es decir, sacar el mayor beneficioposible de cada trabajador y trabajadora.
En este contexto, en lugar de retroceder en nuestro modelo de accin sindical,
debemos seguir adelante con un modelo ofensivo. Debemos fortalecer nuestro
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modelo sindical, cuestionando el modelo
de crecimiento econmico y luchando a
favor de un modelo econmico que se
base en el reparto de la riqueza.
1.3. Medidas empresariales
Antes de presentar un ERE, las empresas
suelen adoptar otras medidas que inci-
den en una progresiva perdida de dere-
chos con la consiguiente precarizacin
de las condiciones laborales.
Es muy importante estar encima de todos
estos movimientos, tener informacin y
trasladar esa informacin, tanto porque pueden ser una antesala de lo que se
aproxima y tambin porque por s mis-
mos suponen profundizar en las vulnera-
ciones y en la precariedad.
Ejemplo de algunas de estas mediadas
empresariales son:
1.- Despido a la finalizacin de los con-
tratos temporales (ya sea este legal o
ilegal, sea o no estructural el empleo
que se cubre). El ingente volumenactual de contratacin temporal, da a
las empresas la oportunidad de reali-
zar verdaderas reconversiones de
plantilla sin tener que pasar por ERE
alguno y por lo tanto sin tener que dar
ninguna justificacin
2.- En el mismo plano, ruptura de la rela-
cin mercantil entre la empresa y la
subcontrata o subcontratas. Todos
estos despidos les salen gratis a las
empresas. La destruccin de este
empleo se encubre con la coartada
legal de finalizacin de los contratos
de obra sujetos a la duracin de la
relacin mercantil subcontratada.
Podemos decir tanto en la medida
anterior como en esta, que se trata de
un expediente invisible. Por lo tanto,
no podemos dar por bueno que la
patronal aproveche estas situaciones
de precariedad para responder asituaciones coyunturales. Debemos
manifestarnos contra toda destruc-
cin de empleo y luchar por el man-
tenimiento de los mismos.
3.- Profundizar en la flexibilidad de las
condiciones laborales sobre todo en
cuanto a jornada y disponibilidad
horaria. Primero en la medida en que
cada convenio o pacto lo permita; des-pus, si no les es suficiente, pedir ms
a los Comits (por ejemplo, ampliar el
tamao de los bolsines de disponibili-
dad horaria previsto en algunos con-
venios).
Esta prctica puede tener tambin
consecuencias graves en la situacin
laboral de las y los trabajadores de las
subcontratas, por lo tanto tenemos
que analizar con rigor las conse-
cuencias que se producen para lasplantillas tanto de la empresa princi-
pal como de las empresas subcon-
tratadas, as como proporcionar
informacin mutua.
En cualquier caso deberemos tener
en cuenta que la patronal utilizar la
actual situacin econmica para una
ofensiva que precarice an mas las
relaciones laborales condicionando el
futuro prximo en cuanto a una mayor
desregulacin de las relaciones labo-
rales.
1.4. Posicin de los
sindicatos
Para responder a la crisis, como en
cualquier otro aspecto de los que en
general corresponden a la accin sindi-
cal, podemos decir que existen dos
maneras de actuar que se correspondecon dos modelos de sindicalismo radi-
calmente diferentes: entrar a gestionar
las consecuencias o luchar para que las
y los trabajadores no sufran dichas con-
secuencias.
En el panorama sindical de Euskal Herria
participan organizaciones sindicales con
importantes responsabilidades en el
mbito estatal por su colaboracin en la
desregulacin de las relaciones laborales
mediante su apoyo activo o silencioso alas sucesivas reformas laborales impues-
tas. Estos sindicatos con su modelo de
concertacin, no tienen ninguna inten-
cin de luchar contra los diversos expe-Koadern
o
sindikalakAbarrekoak
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dientes y medidas que plantean las empresas, y entran a firmar todo tipo de
acuerdos.
Por el contrario, el modelo de LAB es bien diferente. No aceptamos que sean
las y los trabajadores los que paguen las consecuencias de una crisis que nohemos provocado.
Debemos tener claro que a LAB nos corresponde liderar la defensa coherente de
los derechos de las y los trabajadores y hacer frente a la avaricia empresarial, as
como condicionar la actuacin tanto de los sindicatos que practican un sindica-
lismo de gestin, como la de aquellos otros que con un discurso terico a favor
de un sindicalismo de contrapoder terminan gestionando y dando su conformi-
dad a los expedientes como los anteriores.
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2.1. Aspectos bsicos a
considerar
La legislacin es favorable a las empre-
sas. Proceso institucional, proceso admi-
nistrativo. La Delegacin de Trabajo con-
cede importancia a la forma, es decir,
analiza si se han dado todos los pasos
necesarios en la tramitacin del expe-diente (documentacin, actas y acuerdo).
Su funcin suele ser la de amedrentar a
las y los trabajadores (dicen: tomad lo
que ofrecen, porque si tomamos una
resolucin favorable al ERE iris a casa
con menos). Por lo tanto se trata de pre-
sionar a los sindicatos para que den su
conformidad al ERE y as la administra-
cin pueda lavarse las manos. En este
momento, la existencia de tantos ERE se
debe al papel proempresarial que asume
la Administracin y al alarmismo fomen-
tado por los medios.
- Antes de establecer nuestra posicin
debemos diferenciar que expedien-
tes cules responden a una utilizacin
interesada de la actual situacin.
Tomando en cuenta la legislacin sobre
los ERE y el papel de las
Administraciones vascas, a la clase
empresarial se le abre una va malicio-
sa para tramitar expedientes sin ningnargumento. Por supuesto, la crisis les
ayuda en este camino.
- El proceso administrativo debe llevar-
se a cabo siempre con tranquilidad.
El periodo mnimo est establecido por
la ley, as que siempre hay tiempo para
examinar el expediente. No tomar
nunca una postura o decisin concreta
sin realizar un anlisis. Ni sin contrastar-
lo con la estructura correspondiente.
- Cuidado con las negociaciones de
convenios.A menudo la empresa pone
sobre la mesa mejoras sociales a cam-
bio del ERE. Los otros sindicatos suelen
aceptar (sobre todo en atencin a si sus
afiliados y afiliadas estn afectados por
el ERE). En LAB debemos tener claro
que no vamos a aceptar ese tipo de
chantajes. En principio, hay que quitar-
se de encima el ERE. Despus, sabien-
do cmo queda la empresa, activar a la
plantilla a favor del convenio.
- Resolucin del ERE por parte de lasAdministraciones. La decisin corres-
ponde a las administraciones de la CAV
y de Navarra. Como se ha dicho el
papel de estas administraciones suele
ser presionar a la representacin sindi-
cal, o al menos neutralizarla, para que el
acuerdo de los sindicatos y empresa les
evite tomar la decisin del expediente.
Por esa razn, al establecer la lnea de
actuacin frente al expediente nos
parece muy importante interpelar a la
Administraciones y situarlas en el punto
de mira. Como luego comentaremos,
no debemos firmar los EREs para no
facilitarles eludir su responsabilidad
- Situar los problemas y las propuestas
en su globalidad. Tenemos que estu-
diar bien las consecuencias que las pro-
puestas pueden tener en las condiciones
laborales de las y los trabajadores de las
empresas subcontratadas. Tenemos que
exigir a la empresa principal que consi-
dere el problema en su conjunto; por
nuestra parte, las respuestas tienen tam-
bin que darse de forma coordinada.
2.2. Expedientes de Regu-
lacin de Empleo que
responden a situaciones
diferentes
Como se ha dicho anteriormente, losexpedientes de regulacin de empleo
pueden responder fundamentalmente a
dos situaciones:
- Empresas con dificultades para man-Koadern
o
sindikalakAbarrekoak
2. Tramitacin de los expedientes de regulacin deempleo
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tener su viabilidad. En estas empresas no se ha producido acumulacin de capi-
tal en los ltimos aos. Es importante que el o la economista del sindicato analice
la documentacin del ERE. El objetivo es saber cul es la situacin econmica de
la empresa, saber cul es la viabilidad que puede tener.
- Empresas que ven reducidos sus mrgenes de beneficio y utilizan de forma
interesada el expedientepara mantener el nivel de rentabilidad de aos anterio-
res a costa del recorte de los derechos laborales. La mayora de los EREs que se
estn presentando actualmente con motivo de la crisis responden a esta situacin.
2.2.1. Expedientes en base a razones econmicasEn estos expedientes habr que analizar:
- Si es una de esas empresas que histricamente van mal (del plan 3R, o haber esta-
do en quiebra o situacin concursal).
- Analizar el subsector (en Euskal Herria, los efectos de la crisis se estn notando
especialmente en la automocin, en la construccin y en los electrodomsticos).
- Analizar quin es la propiedad (grupo, multinacional, cooperativa).- Hacer una relacin de otras empresas que puedan sufrir las consecuencias (come-
dor, transporte, labores de carga, limpieza) y ponerse en contacto con ellas
desde el principio (con sus afiliadas y afiliados, delegadas y delegados, con res-
ponsables del sector).
- Pasar toda la documentacin a la economista para que analice las auditorias (en
este tipo de EREs tienen que darnos obligatoriamente las auditorias o datos eco-
nmicos).
- Fijar la lnea de actuacin.
2.2.2. Expedientes en base a la bajada de carga de trabajoEn este tipo de expediente es donde se produce el ataque ms fraudulento contra las
y los trabajadores. Para presentar este tipo de EREs no deben analizarse los datos eco-
nmicos, sino solamente la cada de la carga de trabajo en un momento concreto. Si a
esto unimos el alarmismo existente en la sociedad y a los intereses empresariales
(sacar el mayor beneficio posible en todo momento de cada una de las personas inte-
grante de la plantilla), entonces se origina la agresin que vivimos actualmente. En
muchas empresas desciende la carga de trabajo y de inmediato piden despidos.
En estos expedientes habr que analizar:
- Analizar el subsector (en Euskal Herria, los efectos de la crisis se estn notando
especialmente en la automocin, en la construccin y en los electrodomsticos).
- Analizar quin es la propiedad (grupo, multinacional, cooperativa).
- Hacer una relacin de otras empresas que puedan sufrir las consecuencias (come-dor, transporte, labores de carga, limpieza) y ponerse en contacto con ellas
desde el principio (con sus afiliadas y afiliados, delegadas y delegados, con res-
ponsables del sector).
- Pedir los datos econmicos. Segn la legislacin, la empresa no esta obligada a
pasar esos datos, pero debemos presionar para saber cunto capital han acumu-
lado en los ltimos aos. Aqu se produce el juego fraudulento, porque segn la ley
las ganancias de los ltimos aos no tienen en principio importancia para el pro-
ceso. Por lo tanto, esto debemos hacerlo pblico para condicionar al
Departamento de Trabajo.
- Fijar la lnea de actuacin.
Algunas claves para analizar y fijar nuestra posicin frente al expediente:
- Debemos tomar en cuenta el tipo de empresa: si es una multinacional, una empresa
de un grupo o una empresa individual (basada o no basada en la subcontratacin). La
amenaza ser igual en las dos primeras (utilizar la deslocalizacin para abrir nuevas
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puertas a la precariedad. Por ejemplo: una
nueva categora con peores condiciones,
despidos de personal fijo o temporal, para
abrir la puerta a la subcontratacin).
- Considerar si la empresa afectada es o no
es una subcontrata, as como los efectos
que el ERE planteado en la empresa princi-
pal puede tener en las empresas que traba-
jan para ella, es decir, los efectos que
puede tener en las subcontratas. Porque
las consecuencias las padecen las y los tra-
bajadores de las subcontratas.
- Sector:algunos sectores estn creciendo en
Euskal Herria, mientras que otros estn des-
cendiendo (textil,el plstico en ciertos nive-les). El nmero de mujeres en esos secto-
res es grande (aparatos pequeos, textil
en la industria, las mujeres trabajan sobre
todo en empresas basadas en mano de
obra intensiva. Por ello, cuando una parte
del trabajo se trae de fuera y como ese tra-
bajo no es cualificado, las mujeres van a la
calle).
- Tamao de la empresa: En las empresas
grandes lleva ms trabajo organizar a la
plantilla, pero es ms fcil desarrollarlo
mediaticamente, as como condicionar a las
instituciones pblicas. Tenemos que tomar
en cuenta las consecuencias que se produ-
cen a nivel de comarca o pueblo.
- Proporcin de mujeres y hombres afecta-
dos por el expediente. Se trata de evitar
que la consideracin subsidiaria que toda-
va hoy se otorga a las mujeres en el mbito
laboral, haga que estas sean las primeras a
incluir en el expediente en una proporcinque no se corresponde con su presencia
numrica en la plantilla.
- La trayectoria del sindicalismo dentro de
la empresa: tanto nuestra trayectoria como
la de los dems sindicatos: cmo se han
tomado histricamente las decisiones, la
importancia que tenga la mayora de la
asamblea, la fuerza y legitimidad que tenga
el comit, nuestro liderazgo ante la plantilla,
el papel de otros sindicatos con su afilia-
cin Cuando hay subcontratas por medio,tambin tenemos que tomarlas en cuenta
en este anlisis.
- Representacin de LAB: Como comenta-
mos con frecuencia, el tener o no la mayora
condiciona nuestro papel, pero no nuestros
objetivos. La fuerza que tengamos y nuestra
coherencia sindical debe dirigir nuestra
reflexin y nuestra planificacin, siempre afavor de los derechos de las y los trabaja-
dores. Cuando establezcamos la lnea de
actuacin, en LAB tenemos que manifestar
posiciones comunes, basadas en la colabo-
racin entre las y los delegados y las y los
trabajadores de la empresa principal y de
las subcontratas.
- Posicin de la empresa:un ERE puede ayu-
dar a tranquilizar la situacin de la empresa
porque aligera un coste. Pero no servir de
nada si la empresa no da una respuesta a la
raz del problema. Es decir, si el departa-
mento comercial no vende, sus integrantes
sern las y los responsables, si el problema
es de organizacin del trabajo la responsa-
bilidad recaer en la gerencia, si hay que
realizar inversiones el accionariado tendr
que poner el dinero es decir, un ERE otor-
ga margen al empresario para no cumplir
las funciones que le corresponden.
- Asambleas: muchas veces, la empresaestablece desde el principio el nmero de
personas afectadas, normalmente menos
del 50% de la plantilla. Por lo tanto, la
empresa organiza el asunto para que la
mayora no afectada haga salir a la minora,
utilizando para ello la asamblea. En nuestro
planteamiento debemos tener siempre pre-
sente que las asambleas son para organizar
las luchas de las y los trabajadores, no para
decidir despidos. Tiene una enorme impor-
tancia que la seccin sindical est informa-
da y organizada, y por lo tanto asuma un
protagonismo activo ante la tramitacin del
expediente.
- Otros datos importantes a tener en cuen-
ta: antes de meter el expediente hay que
analizar si las y los eventuales han ido a la
calle o no, si ha tenido consecuencias para
las subcontratas, si se han tomado otras
medidas (las mencionadas en el apartado
1.3.). Puede ser importante tener acceso a
los contratos mercantiles que la empresaprincipal ha realizado con las subcontratas,
para analizar que tipo de condiciones estn
previstas en caso de suspensin de la acti-
vidad laboral.Koadern
o
sindikalakAbarrekoak
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3.1. Posicin de LAB
Es muy importante tener una posicin clara desde el principio del proceso, tanto a la
hora de activar a las y los trabajadores como para condicionar la posicin de los otros sin-
dicatos de la empresa y de la Administracin. Establecer claramente la posicin nos da la
capacidad de liderar tanto la lucha ideolgica como la respuesta sindical.
Del lado de la empresa nos llegar un mensaje catastrofista, a menudo con carcter de
chantaje, diciendo que si no se toman medidas de inmediato la empresa se tendr que
cerrar No podemos caer en la trampa de la empresa y entender el ERE como si fuera la
nica opcin posible. Como hemos visto, con frecuencia los EREs no se utilizan para res-
ponder a una situacin coyuntural, sino que la empresa los utiliza para modificar las rela-
ciones laborales.
A pesar de organizar bien la respuesta inicial, la presin puede originar dificultades para
llevar hasta el final nuestra decisin. Para poder dar la vuelta a esa tendencia, debemos
ofrecer herramientas y argumentos.
Una buena defensa contra los EREs es neutralizar las opciones de la empresa. El ERE no
es algo que se plantea de un da para otro, en los centros de trabajo se percibe el movi-
miento con anticipacin, y antes de que la empresa d ningn paso tenemos que hacernuestra lectura de la situacin, para condicionar las intenciones de la empresa y que la
plantilla este informada. En este apartado, el trabajo a desarrollar por las secciones sindi-
cales resulta fundamental.
Tenemos que tener una lnea clara contra la reduccin de puestos de trabajo, y no admi-
tiremos despidos.
Por otro lado, tendremos que tomar en cuenta que las diferentes medidas que se planteen
en la empresa principal pueden tener consecuencias tambin en las subcontratas que
trabajan para ella. Al situar el tema y establecer la lnea de movilizaciones debemos tomar-
lo en cuenta y ver cmo podemos responder de forma conjunta a las vulneraciones de
derechos de los diferentes colectivos. Teniendo claro que la lucha de unos no puede sus-tituir la de otros, sino que deben ser complementarias. Los movimientos que se produzcan
en la empresa principal deben comunicarse a las subcontratas, para que estn al tanto de
las consecuencias que pueden acarrearles. Debemos cuidar la coordinacin entre todas
las empresas que estn relacionadas, pues nuestra fuerza radica en ponernos en marcha
a partir de la acumulacin de todas las posiciones ofensivas. Las empresas pueden ser
diferentes, pero la lucha y la defensa de los y las trabajadoras es solamente una.
3.2. Movilizacin
Si bien es necesario como se ha explicado anteriormente analizar y hacer seguimiento de
la tramitacin de los EREs, est claro que ante ese tipo de ataques a nuestros derechos, lanica opcin posible es la movilizacin. Tenemos que demostrar a las y los trabajadores
que existen otras soluciones y que para ello es imprescindible la movilizacin. Ah reside
nuestra fuerza, y no en la va administrativa.
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3. Actuaciones ante los expedientes de regulacinde empleo
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En funcin de las caractersticas del expedien-
te (suspensin, despidos, a cuntas personas
de la plantilla afecta y por cunto tiempo, situa-
cin de la empresa), la primera tarea es
definir bien los objetivos y establecer cul esla lnea de respuesta adecuada. Eso quiere
decir que por ejemplo- resultara despropor-
cionado convocar una huelga indefinida y aca-
bar negociando las indemnizaciones de las
personas despedidas.
A nivel de pueblo o comarca, como en cual-
quier otro caso, socializar la lucha tiene una
enorme importancia. As, en funcin de la
medida del conflicto, tenemos que analizar
tambin la posibilidad de convocar moviliza-
ciones solidarias con trabajadores y trabaja-doras de otras empresas.
- Si la argumentacin del expediente es
econmica:
Debemos utilizar argumentos adecuados
Situar las deficiencias de la poltica indus-
trial de los Gobiernos de Gasteiz e Iruea
como raz del problema.
Desde el punto de vista comarcal, denun-
ciar la destruccin de empleo industrial en
la zona.
Consecuencias para otras empresas vincu-
ladas a la empresa.
Cuando las y los trabajadores tienen una
edad avanzada debe tenerse en cuenta el
perjuicio para la pensin de jubilacin des-
pus de toda la vida de cotizaciones; o la
situacin que se crea cuando afecta a
empresas con mano de obra intensiva, a
menudo principalmente mujeres con bajos
salarios.
- Si la argumentacin es la carga de trabajo: Dar a conocer pblicamente la acumula-
cin de capital realizada.
Denunciar que se basan en la prepotencia
de los empresarios.
Los culpables de esa prepotencia son las
diferentes Administraciones porque se sit-
an a favor de los intereses de la patronal.
3.3. Interpelar a las instituciones
Los empresarios saben que casi todos los EREs
que presentan son aceptados. La administra-
cin en vez de dirigir la presin a las empresas,
presiona a las y los trabajadores, y cierran toda
opcin que no sea firmar los acuerdos.
Debemos interpelar directamente a las admi-
nistraciones responsables,pidiendo reunionesdesde el principio. Debemos quitarnos de
encima la presin y con nuestras movilizacio-
nes debemos conseguir situar a las institucio-
nes ante la responsabilidad que tienen.
El argumento de la Administracin suele ser
que aceptan los expedientes porque llegan
con el acuerdo del comit de empresa.
Tenemos que tener claro que facilitar el traba-
jo a la Administracin para que eluda su res-
ponsabilidad, no es el papel del sindicato.
Pero lo que las instituciones tienen que garan-
tizar es que no autorizarn los expedientes
que se vienen presentando de forma interesa-
da y con el nico objetivo de precarizar las
relaciones laborales. Eso es lo que debe hacer
saber a la patronal, que examinar con rigor
los expedientes y que stos tendrn que estar
bien razonados. Como hemos dicho, la posi-
cin de las instituciones pblicas no es esa, as
que tendremos que obligarles.
Por otra parte, de cara a socializar la proble-
mtica que se deriva de los EREs, es interesan-
te presentar mociones en los ayuntamientos.
3.4. Finalizacin
del expediente
Ante los EREs que se estn presentando apro-
vechndose de la situacin de crisis, tenemos
que ser rigurosos y mantener una posicin
totalmente contraria a la aprobacin de losmismos.
Mnimos que hay que respetar:
- No firmaremos expedientes que supongan
despidos y no entraremos a negociar la
cuanta de las indemnizaciones.
- No firmaremos expedientes de suspensin.
- Adoptar una posicin clara ante las medi-
das de amortizacin de puestos de trabajo
a travs de lo que podemos denominar
expediente blanco: despidos de eventua-
les, despidos de subcontratas, prejubilacio-
nes, bajas voluntarias
Koadern
o
sindikalakAbarrekoak
8/8/2019 Expedientes de regulacin de empleo y accin sindical
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Con motivo de la crisis, una de las dificultades ms grandes que encontramos en
este contexto es la enorme cantidad de EREs que se presentan, sin olvidar en nin-
gn momento la destruccin de empleo eventual.
Como vemos, el ERE puede constituir un ataque importante contra los derechos de
los trabajadores y trabajadoras. Sobre todo cuando se piden despidos, por una
parte porque se amortizan puestos de trabajo estructurales, y por otra porque la
indemnizacin resulta muy barata para las empresas.
Aunque no podemos medir cul ser la envergadura del ataque que estamos pade-ciendo, es innegable que est teniendo duras consecuencias para la clase trabaja-
dora. Adems de garantizar las respuestas puntuales, tendremos que responder
tambin a nivel global y pensar en las respuestas a dar en esta fase inicial. Como se
ha dicho, es muy importante manifestar una posicin clara ante la prdida de dere-
chos que se est produciendo en las empresas y neutralizarla.
Para ello, es imprescindible responder a la situacin con carcter confederal. No es
un problema de un solo sector. Todo el sindicato tiene que interiorizarlo como
reto.
El o la responsable sectorial comarcal debe garantizar la reflexin y la planifi-
cacin. Para ello hay que hacer un seguimiento puntual de la coordinacin den-
tro del sector, a travs de la persona responsable sectorial. Llevar adelante esa
reflexin y esa planificacin es tarea del sindicato: seccin sindical, sector, fede-
racin y comarca.
Corresponde a la federacin y a los mbitos de direccin ofrecer los diferen-
tes criterios y medios necesarios para esa labor.
Por su parte, las y los secretarios comarcales deben tener conocimiento pun-
tual de los expedientes que se producen en su mbito, as como realizar el
seguimiento y ofrecer la ayuda necesaria para llevar adelante la planificacin.
Coordinacin entre sectores.Al realizar la reflexin y la planificacin, hemos
subrayado la importancia que tiene el tomar en cuenta a todas las empresas que
resulten afectadas. Esas empresas pueden ser de diferentes sectores, pero en la
medida en que la lucha es solamente una resulta imprescindible su coordina-
cin, tanto a travs de las y los delegados como a travs de las y los responsa-
bles comarcales de los sectores.
Por consiguiente, la lectura que se hace como sector tiene una importancia funda-
mental; la lectura sindical, por decirlo de alguna forma (subsector, sea grupo o no,
lectura de la seccin sindical y dinmica), y tambin la que se hace como comarca;
lectura poltico-sindical (cuntos puestos de trabajo se amortizan, si se trata o no de
mujeres). Ambas son necesarias en la reflexin y en la planificacin.
En todos los momentos del proceso tenemos que conocer las propuestas de LAB,
las de la empresa, las de otros sindicatos y la situacin de las y los trabajadores, y para ello hay que garantizar la participacin de las estructuras, ofreciendo a
delegadas y delegados argumentos y medios que les permitan realizar su trabajo.
Asimismo, la representacin sindical tienen que tener claro desde el principio
que las personas liberadas del sindicato tienen derecho a estar presentes en
15
4. Participacin de las diferentes estructuras delsindicato
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cualquier momento del proceso (reu-
niones,asambleas),as como que esa
presencia es conveniente y necesaria.
Una intervencin que puede resultar mstcnica es la de la persona economista
del sindicato. Es importante tener en
cuenta su anlisis. Tomando en cuenta los
tipos de ERE:
- Si se basan en razones econmicas:
Analizar las cuentas.
Participar en la negociacin (para
analizar la viabilidad).
Realizar el contrainforme.
- Si se basan en ausencia carga de tra-
bajo:
- Cuando consiga las cuentas, el comit
se las pasar al / a la economista del
sindicato para que sta las analice.
- Si hay acumulacin de capital, puede
ayudar a establecer la lnea de inter-
vencin (nos dirn si se ha producido
reparto de dividendos, qu ganancias
ha habido, si estas se han invertido enla empresa o en otras empresas del
grupo). A determinado nivel, as
sabremos si es un expediente de base
fraudulenta.
Para terminar, tenemos que subrayar una
vez mas la importancia de las secciones
sindicales. Compartir en todo momento
con la afiliacin (al presentar formalmen-
te el expediente y tambin con anteriori-
dad) la lectura de la situacin de laempresa y los planteamientos, tiene una
gran importancia para cohesionar a
nuestra afiliacin y para condicionar la
asamblea en la direccin adecuada en
cuanto a respuesta y movilizacin.
Koadern
o
sindikalakAbarrekoak
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El reparto desigual de la riqueza y su concentracin en cada vez menos
manos, esta en el origen de la actual situacin de crisis econmica. Hay res-
ponsabilidades polticas que han fomentado con sus polticas monetarias,
sociolaborales y fiscales que nos encontremos en la actual situacin.
Asistimos a una utilizacin interesada de los EREs, convertidos en la actual
situacin, en un instrumento mas a favor de los intereses de la patronal para
introducir la f lexibilidad de las condiciones laborales. Por ello LAB debe man-
tener una posicin totalmente contraria a la aprobacin de los mismos.
El ingente volumen de contratacin temporal y subcontratacin pone a dispo-
sicin de las empresas la facultad de destruir empleo gratis. Estas situaciones
deben de tomarse en consideracin en nuestra intervencin sindical que no
puede quedar limitada por lo tanto al ERE.
Desde el principio del proceso negociador del expediente LAB debe marcar
posiciones claras y no caer en la filosofa envenenada del mal menor al que
siempre intentarn llevarnos tanto la empresa como la Administracin respon-
sable de la resolucin del expediente.
La resolucin de los EREs corresponde a las administraciones de Navarra y de
la CAV, que han optado por presionar a la representacin sindical para que lafirma de un eventual acuerdo, permita eludir su responsabilidad de tener que
tomar la decisin. Debemos interpelar a las instituciones correspondientes.
Si bien es necesario hacer un seguimiento de la tramitacin de los EREs (an-
lisis, contrainforme...) no debemos olvidar que solo nuestra capacidad de
movilizacin puede dar la vuelta a la situacin.
La representacin sindical de LAB en los centros de trabajo debe asumir una
posicin de liderazgo en la defensa de los derechos de las y los trabajadores
para condicionar las decisiones de la empresa y la de los sindicatos que no
estn dispuestos a hacer frente al expediente.
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5. Conclusiones
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