en compañíade losSantos

del mes deAgostoDía 2 San Pedro Julián Eymard (1811-1868)Presbítero y apóstol de la Eucaristía

Pedro Julián nació en La Mure, D’lsére, Frenable, Francia el 4 de febrero de 1811. Trabajó con su padre hasta los 18 años. En sus horas libres estudiaba latín y recibía clases de un sacerdote con quien trabajó.

En 1831 entró al seminario de Grénoble y después de 3 años fue ordenado sacerdote. Los primeros 5 años de ministerio los realizó en una parroquia, luego pidió permiso al obispo para ingresar con los Hermanos Maristas donde ejerció varios cargos, pero el centro de su vida siempre fue la Devoción al Santísimo Sacramento.

Por Alberta Salas Flores, fsp

Fundó la Congregación femenina, a la que dio el nombre de: “Siervas del Santísimo Sacramento”

Él mismo relata una extraordinaria experiencia; dice que un día mientras oraba, quedó fuertemente impresionado por el estado de abandono que tenían los sacerdotes seculares, la falta de formación de los laicos, no había devoción al Santísimo Sacramento y se cometían sacrilegios contra la Sagrada Eucaristía.

Fue entonces que decide fundar una tercera orden masculina, devota a la Adoración que fuera reparadora y que se convertiría después en la Congregación consagrada al Culto y Apostolado de la Eucaristía, la Congregación del Santísimo Sacramento.

Fundó también una Congregación femenina, a la que dio el nombre de: “Siervas del Santísimo Sacramento”,

con la misma finalidad que la de los varones, la de honrar al Santísimo Sacramento.

Después de muchas dificultades, conflictos y peripecias de todo tipo, incluyendo las financieras, el 21 de julio de 1868 por la tarde, el Padre Eymard, desgastado por el excesivo trabajo, extremadamente delgado e incapaz de tomar la más mínima comida, llegó a su casa de La Mure, y el primer día del mes de agosto, muere a causa de una hemorragia vascular cerebral; tenía 57 años. Después de su muerte y ser sepultado, comienzan a ocurrir milagros ante su tumba.

El Papa Pío XI, lo beatificó el 3 de agosto de 1925 y el 9 de diciembre de 1962, el Papa Juan XXIII lo canoniza.

Día 9 Santa Otilia (662-720)Patrona de los enfermos de la vista

El señor feudal gobernaba Alsacia por el año 720 y se llamaba Aldarico. Era un pagano recién convertido al catolicismo, y por tanto su conversión no era todavía completa. Él deseaba tener un hijo varón y le nació más bien una hija y además estaba ciega. Esto le enojó mucho y la mandó lejos de su castillo quedando expulsada. Llevaron a la niña a un convento de religiosas que estaban lejanas del castillo de padre de la pequeña. Las religiosas del convento la educaron según en las enseñanzas de Jesucristo. Otilia crecía, y un día llegó el Obispo San Erardo a quien en sueños se le ordenó que fuera a la casa de las religiosas y bautizara a una niña. Le presentaron a la niña cieguita y le puso el nombre de Otilia que significa “Luz de Dios” y al administrarle el sacramento le dijo: “Que se te abran los ojos del cuerpo, como se te han abierto los ojos del alma” y la niña recobró milagrosamente la vista. El Santo Obispo Erardo fue al castillo donde estaba el papá de Otilia para

pedirle que aceptara a su hija, y como él no quería, entonces otro hijo, hermano menor de Otilia, llamado Hugo, intercedió para que su hermana mayor, Otilia volviera. Su padre Aldarico la aceptó pero como sirvienta, no como hija. Poco tiempo después Aldarico se encariñó con ella por su bondad y caridad. Después se dispuso a casarla con un gran señor de origen alemán, pero Otilia desde que estuvo en el convento había decidido ser religiosa, por lo cual no aceptó y decidió huir. Su padre envió soldados a buscarla y ella, con la ayuda de Dios se escondió y no pudieron encontrarla. Su padre entonces arrepentido publica un decreto de perdón y le permite ser religiosa.

Otilia regresa al castillo y su padre le regala un convento en una alta montaña, para que se fuera con sus amigas y funda el convento de Otelburg. Alderico al ver la santidad de su hija, se convierte, y se van él y su esposa al convento donde mueren piadosamente. Otilia después de dedicarse muchos años a los pobres y enfermos muere en la paz de Dios el 13 de diciembre del año 720. A partir de entonces se empezaron a obrar muchos milagros.

Fue canonizada en el por el Papa León XI y en 1946 el Papa Pío XII la nombró patrona de toda la región de Alsacia.

Día 9 Santa Teresa Benedicta de la Cruz (1891-1942)Edith SteinReligiosa y Co-patrona de Europa

Edith Stein nació el 12 de octubre de 1891 en Breslavia (Wroclaw), la capital de la Silesia, en Alemania, población que después de la Segunda guerra mundial, pasó a ser de Polonia. Fue la última de once hermanos. Sus padres fueron Sigfred y Auguste, quienes se dedicaban al comercio. El día en que nació Teresa, en su familia se festejaba el Yom Kippur, la mayor fiesta hebrea, el día de la expiación. “Esto hizo, más que ninguna otra cosa, que su madre tuviera una especial predilección por su hija más pequeña”. Precisamente la fecha de su nacimiento será para la futura carmelita, un vaticinio.

Al morir su padre en el año de 1893, su madre tuvo que hacerse cargo de dirigir el negocio de la familia y de la educación de sus hijos. Para Edith, la pérdida de su padre a sus escasos dos años fue sin duda una pérdida dolorosa que la hará muy perceptiva. Ella escribió de sí misma que de niña era muy sensible, dinámica, nerviosa e irascible, pero que a los siete años, ella empezó a madurar y a adquirir un temperamento más reflexivo.

Como en toda familia hebrea practicante, Edith fue educada desde su infancia de acuerdo a las tradiciones de su pueblo y religión; sin embargo, a los catorce años abandonó la fe que sus padres le habían inculcado y se vuelve atea; no obstante, de los principios religiosos que le fueron enseñados, conservó el ideal de una moral profunda.

Inquieta por encontrar la ver-dad que diera sentido a su existencia, siendo todavía muy joven, se dedicó a estudiar la filosofía y ahondó en la fenomenología. Para realizar sus estudios, se dirigió a la universidad de su ciudad natal, y, posteriormente, a las de Gotinga y Friburgo de Brisgovia. Fue en esta última donde se hizo discípula del filósofo Edmund Husserl, y posteriormente de graduarse en filosofía (1916), se convierte en auxiliar de su maestro, a petición de éste, durante breve tiempo. Hussel declaró que ella era la mejor estudiante de doctorado que jamás había tenido, incluso que fue más capaz que Heidegger, quien también fue su alumno. Para ella, sus estudios, sus libros, sus compañeros, y, sobre todo, el célebre profesor Edmund Husserl, eran su vida. Durante este tiempo se puede decir que llegó a profesar un total ateísmo. Varios de los discípulos de Hussel se convirtieron al cristianismo. Pero Dios tiene sus caminos para aquellos que le buscan con sincero corazón en la búsqueda de la verdad, como lo hicieron el Apóstol Pablo y Agustín de Hipona entre muchos otros. Como en 1914 inicia la Primera Guerra Mundial, todos los amigos de Edith fueron convocados para enrolarse en la guerra, y ella tomó un curso de enfermería se puso a trabajar como enfermera en un hospital austriaco que contaba con cerca de cuatro mil camas. A esta obra se entrega de lleno al grado de que se le dio la medalla a la valentía.

Al finalizar la guerra, ella volvió a retomar sus estudios filosóficos y a seguir en búsqueda de la verdad, ya que con la experiencia de la guerra, de los cientos de enfermos y moribundos que atendió en el hospital y del testimonio de muchos cristianos, estaba con más confusión e inquietud sobre cuál era el origen de todo cuanto existía y el sentido de la misma vida. La hora de su proceso de conversión llegó cuando por la muerte de un amigo suyo, fue a visitar y permanecer un tiempo con la viuda de éste, quien en lugar de estar desconsolada, poseía una paz y serenidad por la fe en Dios que tenía. A Edith, la muerte le impactaba profundamente y más aún al tratarse de un amigo suyo tan cercano; los fundamentos e ideas filosóficas que había adquirido no le daban la

respuesta ante la muerte. Además, deseaba saber el origen y fundamento de la paz y fe de su amiga Hedwig Conrad, la viuda de su amigo fallecido. Estando en casa de ella, tuvo oportunidad de leer la autobiografía de Santa Teresa de Ávila, y al terminar de leerla esa misma noche, llegó a la conclusión de que ahí estaba la verdad que tanto había buscado y posteriormente decide hacerse cristiana y recibir el bautismo al principios de enero de 1922.

Más tarde, comenzó a dar clases de idioma alemán en el Colegio de las Hermanas Dominicas en Speyer, en donde permaneció ocho años. También fue sin duda un tiempo en el que ella meditó y fue descubriendo su vocación a la vida religiosa al contemplar y ver a las religiosas Dominicas que habían consagrado a Dios su vida y todo cuanto realizaban. Es así que decide entrar a la orden del Carmelo en 1933 y después de su noviciado, en 1934 hace su profesión religiosa tomando el nombre de Teresa Benedicta de la Cruz. Escribió varias obras espirituales de contenido profundo y místico.

Al comenzar la persecución contra la población judía en Alemania, es enviada a un monasterio de Holanda, y evitar así que le llevaran presa a los campos de concentración por ser de origen judío. Sin embargo, los alemanes también penetraron en Holanda en represalia porque los

obispos habían apoyado a los judíos para que no fueran deportados a Alemania y tuvieran su fin en los campos de concentración.

Es así que el 2 de agosto de 1942, se presentan los nazis para llevarse presas a Teresa Benedicta de la Cruz y a su hermana Rosa, quien se encontraba en Holanda para dirigirse hacia un lugar más seguro. Ambas son llevadas al campo de concentración de Mersforrt. A partir de ese momento comienza el camino hacia el calvario de la Teresa Benedicta junto con su hermana Rosa, en medio de humillaciones, tormentos y muchos otros ultrajes inexpresables. El 7 de agosto de 1942 son trasladadas a Auschwitz en donde llegan el 9 de agosto y de inmediato son conducidos a la cámara de gas. Ahí muere como mártir y se ofrece como holocausto por la salvación de los pecadores, la liberación de su pueblo y la conversión de Alemania.

El Papa Juan Pablo II la declaró santa y mártir el año de 1998.

Día 16 San Roque de Montpellier (1295-1327)Patrono de los peregrinos y protector ante las epidemias

Roque nació más o menos en el año 1300 en Montpellier, Francia. Sus padres, Juan y Libera, eran nobles vasallos del rey Jaime II de Aragón. El nacimiento de Roque se considera una respuesta a la petición humilde e insistente a Dios por parte de sus padres. Cuando nació era fuerte y robusto, mostraba en el pecho y en la espalda una cruz rojiza, como gravada a fuego. Tenía una predisposición natural a la caridad y para hacer del bien a todos, revelada en sus costumbres. A los 12 años muere su padre, y al los 20, fallece su madre, quedando como único heredero de las cuantiosas riquezas que sus padres poseían.

Al parecer, Roque asistió a las escuelas de Montpellier y comenzó la carrera de medicina, lo cual le hizo adquirir conocimientos suficientes para atender a los enfermos. Apenas quedó libre de las responsabilidades heredadas, vendió todas sus propiedades y repartió sus riquezas entre los pobres para luego ir a vivir la regla de la Orden Tercera de San Francisco, abrazando amorosamente la virtud franciscana por excelencia: la pobreza. Siguió el consejo de Jesucristo que dice a quienes desean seguirle completamente: renunciar a todo cuanto se tiene, repartir los bienes entre los pobres y después podrá ser su discípulo. Esta primera parte del llamado de Jesús a Roque estaba hecha, porque ya había vendido todo cuanto poseía y lo había repartido entre los pobres. Ahora le faltaba la segunda... “Ven y sígueme”. Fue entonces que tomó el camino para atravesar los Alpes e ir a seguir a Cristo atendiéndolo en los enfermos que se encontraban al norte de Italia, donde había estallado la peste del Tifo y la gente caía muerta por todas partes. Al llegar al lugar, comenzó de inmediato a atender a los contagiados por a peste, y muchos enfermos que él atendía, resultaban curados haciéndoles la señal de la cruz en la frente, y a muchos más les ayudó a bien morir y él mismo les hacía la sepultura, pues nadie quería hacerlo por temor a contagiarse.

Finalmente, un día, al atender a un enfermo, se sintió también él contagiado, su cuerpo se llenó de úlceras y manchas negras. Roque decidió retirarse a un bosque solitario para no contagiar a nadie. Ahí nació una fuente de agua cristalina; y sucedió que un perro, procedente de una casa perteneciente a un importante personaje, tomaba de la mesa de su amo una pieza de pan y la llevaba hasta el lugar donde estaba Roque para que éste se alimentara. El amo se intrigó por el comportamiento de su perro y decidió seguirlo para ver a dónde se llevaba el pan que tomaba de la mesa. Fue así que el rico señor encontró al pobre Roque, y viendo las condiciones en que se encontraba, se lo llevó a su casa para brindarle los cuidados y atenciones médicas que requería hasta que sanó por completo.

Al quedar curado, Roque se dirigió a Montpellier, que se encontraba en guerra, entonces lo confundieron con un espía y lo encarcelaron, en donde lo mantuvieron prisionero por cinco años. Mientras estuvo preso, se dedicó a consolar a los demás reos y ofrecía sus penas por la salvación de las almas. Murió el 15 de agosto de 1378. Existe la historia de que los que estaban preparando el cuerpo de Roque para colocarlo en el ataúd, se dieron cuenta de que él era el hijo del gobernador por la cruz de su pecho, la gente comenzó a invocarlo para pedir alivio a sus penas y enfermedades, y consigue admirables milagros.

Fue canonizado en 1584 y se le considera protector ante la peste y las epidemias.

Día 19 San Juan Eudes (1601-1680)Presbítero y fundador

Juan nació en Ri, pueblo de Francia, el 14 de noviembre de 1601. Como sus padres no habían podido tener hijos, hicieron una peregrinación al Santuario de Nuestra Señora, y Dios les concedió un hijo, Juan, y después de él a otros cinco. Desde pequeño mostraba gran piedad. Un día un compañero lo golpeó en la mejilla, y él, para cumplir lo que dice el Evangelio, le presentó la otra mejilla.

Estudió en el seminario de Paris llamado el Oratorio, que era dirigido por el Cardenal Berulle, quien al descubrir en Juan una gran capacidad de predicar misiones, apenas ordenado sacerdote lo envió a predicar por pueblos y ciudades, logrando un notable éxito. La gente comentaba: “En la predicación es un león, en la confesión es un cordero”.

Ofrecía su servicio con gran caridad empleando sus dones de bondad, prudencia, energía y vida para atender a los enfermos de la peste. Una de las experiencias que adquirió en sus años de misionero fue que las mujeres de mala vida que querían regenerarse, no encontraban la manera de salir de esa situación, porque nadie les tendía la mano; él decidió ayudarlas y alquiló una casa en la que podían albergarse mientras encontraban un trabajo decente. Viendo que la obra necesitaba también de atención religiosa, ofreció este trabajo a las religiosas “Visitandinas” que aceptaron ayudarle en su obra.

Juan creó también una sociedad de sacerdotes consagrados a la formación de seminaristas para las predicaciones populares llamados: “La Congregación de Jesús y de María”, mayormente conocidos como “Eudistas”. También fue el fundador del culto litúrgico de “Los Corazones de Jesús y de María”. Juan es uno de los maestros de la espiritualidad francesa.

En sus últimos años de vida, el futuro santo escribió la obra titulada “El admirable Corazón de la Santísima Madre de Dios”. Predicó su última misión de nueve semanas en la plaza pública, en 1675, en medio de un frío glacial; fue tan enorme el esfuerzo realizado que acabó con su salud. A partir de entonces se retiró de la vida activa.

Murió el 19 de agosto de 1680 y fue canonizado en 1925.

Día 30 Beato Tomás de Kempis (1380-1471)Presbítero y apóstol de la Eucaristía

Tomás nació en Kempis, cerca de Colonia, en Alemania, el año de 1380 de una familia muy modesta, sus padres Juan y Gertrudis, se dieron cuenta de la gran inteligencia que tenía su hijo, su fecunda imaginación y la exquisita sensibilidad. Su hermano mayor había ingresado con los “Hermanos de la Vida Común”, y Tomás siguió su ejemplo. Desde entonces se le encontrará estudiando bajo la tutela de Justino Radewijns, hombre muy notable de la época.

En este tiempo va declinando la Edad Media y se oye por todas partes de la Reforma de la Iglesia. Gerardo Groote comprendió que la verdadera reforma empieza reformándose cada cual a sí mismo. Después de fuertes dificultades, Tomás ingresa en el monasterio perteneciente a la Congregación de Windesh Eim, que había sido fundado recientemente y cuyo primer prior era precisamente su hermano Juan.

Tomás profesa y recibe la ordenación sacerdotal en 1413. Desde entonces pasará toda su vida en Lunenkerk, viviendo una vida fervorosa y fecunda, simple, ordenada y devota, con una vida puramente contemplativa, la cual dividía entre el estudio, el trabajo y la oración. Varias veces fue superior y también se le confió la formación de los novicios, ya que era muy reconocido y apreciado la forma de dirigir espiritualmente y formar a sus alumnos, además de los acertados consejos que les daba. Tenía también el don de consolar a las almas atribuladas.

Otra de sus aptitudes fue la de ser un copista pulcro y diligente; y escribió varias obras espirituales. Sus escritos son modestos tratados devotos en donde recomienda la vivencia de las verdaderas virtudes: la renuncia, la humildad, la obediencia. Escribió para sus hermanos los novicios y para sí mismo, por ejemplo el Soliloquio del Alma. Entre sus obras inspiradas desde de su corazón piadoso, fluye sobre todo “La Imitación de Cristo”, un libro sencillo y sincero que enriquece, desprende y eleva confiándonos su sabia doctrina. Su oración y sus confidencias presentan al hombre en sus rasgos inmortales, refleja la constante inquietud del alma, sus profundas ansias de amor que lo conducen enteramente. Su palabra es el eco fiel de la lucha del hombre con su amor propio, siempre renaciente, y de acercarse a Dios y poseerle. Tomás muere el 30 de agosto de 1471.

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