idea de progreso_Bury

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Título original : T be idea and growtb I i* ' ., Traductores: Elíasi *ár, y ol progress. An inquiry into its origin, Julio Rodrfguez Aramberri Dedicado a la memoria de Charles Frangois Castel de Saint-Pieme Marie Jean Antoine Nicolas Caútat de Condorcet Auguste Comte Herbert SPencer y otros optimistat mencionados en e§te Volumen Ta,ntane uo,s generis tenuit fiducia' uestrii O Macmilland and Company, Ltd., Londres o Ed. casr.: Alianza Editoriar, s. A., Madrid , 197r Calle Milán, 38; A 200 00'45 --'' Cubierta: Daniel Gil Depósito legal: tsI - 7gl " l,gl L fqnr.*.pol El.. Belgas; Nma. sra. de la cabeza, 2. Bilbao Printed in Spain

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  • Ttulo original : T be ideaand growtb I i* ' .,

    Traductores: Elasi *r, yol progress. An inquiry into its origin,Julio Rodrfguez Aramberri

    Dedicado a la memoria deCharles Frangois Castel de Saint-Pieme

    Marie Jean Antoine Nicolas Catat de CondorcetAuguste Comte

    Herbert SPencery otros optimistat

    mencionados en ete Volumen

    Ta,ntane uo,s generis tenuit fiducia' uestrii

    O Macmilland and Company, Ltd., Londreso Ed. casr.: Alianza Editoriar, s. A., Madrid , 197rCalle Miln, 38; A 200 00'45 --''

    Cubierta: Daniel GilDepsito legal: tsI - 7gl " l,gl Lfqnr.*.pol El.. Belgas; Nma. sra. de la cabeza, 2. BilbaoPrinted in Spain

  • :Prlogo

    Se puede creer o no en la docrina del Progreso, peroen cualquier caso 1o que indudablemente posee interses analizar sus orgenes y evolucin histrica, incluso si enltima instancia resultase no ser ms que un ido'lumsaeculi porque de hecho ha servido paru dirigir e impul-sar tod a la civiLizacin occidental. El progreso terresue dela humanidad constituy, en efecto, la cuestin centrala la cual se subordtnan siempre todas las teorfas y movi-mientos de carcter social.La frase ciuilizocin y pragre'soha quedado estereotipada paru indicar el juicio bueno omalo que atribuimos a una determinada civilizacin segnsea o no progresiva. Los ideales de libertad y democra-cia, que poseen su propia, antigua e independiente vali-dez, adquieren un nuevo vigor cuando se relacionan conel ideal del Progreso. La conjuncin de libertad y pro-greso

  • 10 prIogocarct.* belicista, que niegan ra-posibiridad de todo pro-yecto de paz. perpetua, lo- que h...n

    -., -.orrsiderar a lagueffa como insffumento inispensable pam ;i-p;;;reso.En nombre del progreso decun ilt ltr* Ios doctri-narios que han instar ado en Rusia el Lrm^l (L920) rgi_rnen de rerror. Todo eilo parece probar ra indudabrevigencia de una forma de p.rru, que atribuye escasasprobabilidades de supervivencia a tu teorla o progra-rna social y poltico lncupuz de gr*-";; armon izacincon esa idea direc tiz que es el proi..;". --'La Edad Media europea ,.- gi con criterios rnuydiferenres. La idea de unaiiau utIrt.rr.*_.ra, en efecto,su punro cenrral de referencia, en virtud der ;;ii;,

    .ormimportantes de esta vida *lnr";i;; ilorlrn siempredesde la perspectiva d. i, "irr'iid, .n .t-*, all. Cuan-do los sentirnientot ms prof,ndos delos ho*bres reaccio-naban m. poderosa y establemente anre la idea de lasalvacin del alma que ante ningun

    ^ rr^, era precisa-mente la armonra

    .on esa idea i, q,r. permita establecerlr..eI juicio sobre las .posibilidades .il d;;i;encia de lasinstituciones

    -

    y teorrs sociares. La uie; mon, tica, porejernplo, se desarroll baio ro in[*** rnien*as que laIibertad de concie ncia carccla de su apoyatura. Con unanueva idea dfuctriz, dicha situacin .ui : la libertadreligiosa creci as Lajo l^ ;g dJ p;;!r.ro, mienrrasque la vida mons tica no irdo invocar- ninguna rela-cin con 1. r- ---

    La esp eranza de log{ar una sociedad feriz en este mun_do paru [as futuis r&ai;;;;H;iJJ'. una socie-lud a.la que de mod relatiuo r. pu.iJ .riiri.ar corno fe-liz-.ha venido a ree np$1o;,;o centro de rnovili zacinsocial, ala esperanza a relic;il" orro rnundo

    .Lacreen-cia en una inmort alidad p.m"n, ri.r.-'ioirrf, ampliavigencia, pero, no poa..;; 1;.i; ;; toda honra-dez' que dicha '....r.i, ,lrr-qr" ya d. .onstituir el eiede Ia vida colectiva, es decir j .rit.rig Spro paruer enjui_ciarnienro de los *lor., sociales ? M.hr' genre, porsupuesto, no opina de esta manera, pero quizsun nmero

    Prlogo 11an mayor considera que de algo tan incierto como e esacreencia no cabe tazonablemente hacer depender vidasy formas de pensar. Los que as piensan, constituyen

    -sinduda la mayorTa, pero este pensamiento admite muchasgradaciones. Difcilmente nos equivocaramos al afirmargu, por regla general, la creencia ultraterrena no rige laforma de pensar de quienes la admiten y que sus emo-ciones reaccionan ante ella muy dbilmente, que esa creen-cia es sentida como algo remoto e irreal y que suinfluencia directa sobre la conducta real es mucho menorque su influencia sobre Jos argumentos absffactos tlpicosde los tratados de moral.

    Regido por la idea del Progreso, el sistema tico delmundo occidental ha sido modificado en los tiemposmodernos por un nuevo principio que aparece dotado deuna import ancia exmaordinari a y que deriva precisamen-te de ella. Cuando Iscrates sintetiza su regla de vida enla frmula

  • PrIogosobre las grandes conclusiones que esrn implicadas endicha investi gacin y que deben quedar fuera de susrnodestos lmites . Lis .riti.* ocasinales sobre algunasformas particulares que l'r a;;' creencia en elProgreso o sobre algunos argurn.nto, aducid;;;.irpo-yo, no deben, por ruquesto, entenders. .o*o juicios sobresu validez general. p.ho,' ;o gb;r" .;;;1", do,observacions. Las d;J;' r"-r.irrd* h;.; alrededor detreinra aos por Mr. Barfou;;; un escrito suyo aparecidoen Glasgow no han rid9,-;;;1" que yo conozco, conres-tadas todavra. Es probri ru *r.h, . Ios que haceseis aos haban

    .nrideradJ.o*o semi-fantstic a laideade la repentina ..rJli.i;.; iiu.rr. de nuesrra civiliza-cin occidental, corno resrlado no de- accin de fuer-zas csmicas. sino por la ininica- d;; iropio desarro-llo, hoy se sientan-mucho-rnllqq seguros de su opinin,a pesar der hecho de qug $ p;trg;E s.nr., der rnundohayan constituido "n Li,gi lo.i.drd-? nacones paruIa prevenc

    dt, ;;;,'il,*' h,T,Ti.3'ii;*;,lJ,i* *:::frl"brj!il: un importante paso ud.lrntl-.n el .riro

    La imoort ancia de las apofiaciones francesas aldesa-rrollo de i1 id; d.togr.o .rtiruye una cara*erfsti-ca destacada de su hirtoiir. Francia ;, li' igrur que raantigua Grecia , ha sido ,l.*pr.'

    '.dg*,;rI;principar-rlrponrrbr."P."rt':rffi:f ir"r?r:;del con..pt a. pig*r. si, ;;; ,rnro, es ar pensarnientofrancs al que constantemenie se dhigir nuesrra aten-cin, no se ebe ni a una rrbiiruriu pr.?.*i.i, por parremla ni tarnpoco al olrrido d;i" ;ortado por o*os pases.

    Introduccin

    cuando decimos que las ideas gobiernan el mundo oque ejercen un podef decisivo ., i, Historia, pensamosgeneralmente en aquellas ideas que expresan uriirr.ioneshumanas y cuya rcalizacin depede de la volunird huma-frd, como por ejemplo la libertad, la tolerancia. la isual-d,u4 d., oporrunidades,]I-locilismo. Algunas'han "riJorcalizadas en

    .pa1-t. y no hay ruzn paru q. calquiera debllas no pueda llegar a ser rcalizida .ri ,rr, ro.idrd on el mundg, .

    si esre fin fuese el propsito comnde una sociedad o del mundo. Esas idas ,o, ob.io .aprobacin o de rechazo, segn se :oideren b.nus orhalas,- y go por ser verdadrm o falsas. pero h^y or.,ifas de ideas que pueden rener una grn irrrpor, ancia enla determinacin y orientacin de la lond.rcia hrm* a yque,'sin embargo, no dependen de Ia voluntad del hombre.Son ideas referentes a los misterios de la vida, tales como{ Destino, la Providencia o la inmort alida p.rrorrul.Estas ideas pueden actuar de modo importanre ,obre lasformas de actuacin social, pero encieryan una cuestin

    L3

  • t4 Inroduccinde hecho. y

    .lon -aprobadas o rech azad,as no por su utilidado su perjudicialidad sino porque se las- supone verdade-ras o falsas.

    La idea d.l progreso de ra Hurnanidad pe*enece aesta segunda clase, y esto conviene aclarurlo desde unprincipio. Ahora lo damos " por sentado, somos tanconscientes del constante progrro de nues*os conoci-mientos, de las artef,. de la'ca{acidad d. org anizacin, detoda suerte de t.tui.ior, q;;", resulta sencillo conside-tat el Progreso como una meta; corno igual que lo es lalibertad o una federacin-- inir.rsal, cuya consecucindepende nica y .".r"ri"uri.rrr. d n,r.rrro, propiosesfuerzos y nuesrra b".nu -;;h;uJ. p.ro, pese a quetodos los incrementos d. pod* y d. .orro.i*iento depen-den del esfu erzo human o,iuiJ.r-del Progreso de la huma-nidad, de la que derivan ,,r- uulo, to.', .ro, progresosparticulares, suscita una clara cuestin de hecho ^

    i; queIos deseos y eJ *abaio de1 hombr. no-p,r.d.n aectar,igual que. lo pueden r"lng;;T;;i;;';r;, de ta turnba.Esta idea signific qlre civiliru.ii-r. r,u *orrio,se mueve y seguir movindose en la direccin deseable.Pero para podr .juzgat si nos estamos rnoviendo en unadireccin eseabll en&a;;; ny. saber con exactitudcul es Ia rnek. paru *".t *, .l fi" .rbre de Ia evoru_cin hurnana sera un .rtrd sociar .n .f q,r. todos loshabitantes de la Tie*a ll.uur."" ;-oilr*.i, perfecta-menre eliz. Pero es imposibi. ,.". r la..rt.ru d. que lacivilizacin se est rnoviendo en u -irdin adecuadaparu llegar a esa meta. ciert ,rp..ro, de nues*o ((pro_greso)> pueden presentarse en faior de ese argumento,pero siernpre existen ctros que Ie sirv.n d. contrapeso, ysiempre ha sido fcir d;;:il

    ,r., desde Ia perspectivade una felicidad creciente, r^ t.id.;;, . nr.srra civi_lizacin prosresiva r. hrirl.;r'd;j;-a.le. En resu_rnen, no se puede prob-^, que esa _der;.;;il, mera haciala que se dirige el o.,,r.,i; i;.r;;bi; rnovirnientopuede ser Progreso, o puede Jrir. en una direccin nodesead a y, por tanto, ,o ,., progi.so. Esto es una cuestin

    L5Inmoduccin

    de hecho, tan insoluble en estos momentos como la dela inmortalidad personal. Es un problema que atafle alos misterios de la vida.

    Por otra parte, incluso si admitimos gue es probableque el curso - de la civilizacin haya evolucionado hastahot, en la direccin deseable Y 9ue, de seguir asl llega-remos a la felicidad general, no podemos probar que suarribad a f.ehiz depend enteramente de la voluntad huma-na. Pues la marha hacia adelante podrla verse detenidaen algn punto por un obstculo infranqueable. Tome-mos, por ejemplo, el caso del saber. Siempre sobrenten-demos que'la ontinuidad de su progreso futuro dependetotalmete de Ia continuidad del esf uerzo humano ( supo-niendo que el cerebro humano no degenere ), Esa presun-cin se bata en una experiencia estrictamente limitada.La ciencia ha avanzado inintemumpidamente durante losltimos ffescientos o cuatrocientos aos, todo nuevo des-cubrimiento ha llevado a nuevos problemas y a nuevasfrmulas paru solucionarlos y ha abierto nuevos camposa la invesiigacin. Hasta ahora, el hombre de ciencia nose ha visto obligado a detenerse y ha encontrado losmedios paru proseguir su camino. Pero, podemos estarseguros de que no se encuenme algn da con un obs tcu-1o infranqueable? Una experiencia limitada a un espa-cio de cuatrocientos aos, durante los cuales hemos empe-zado a conocer con xito La parte ms superficial de laNaturaleza, no puede ser consid erua como garunta deconclusiones referentes a operaciones que hayan de exten-derse a lo largo de omos cuamocientos o de cuamo milsiglos. Pensemos en la biologla o la astronoma. Cmopodemos asegurar que algn da el progreso de estasciencias no llegue a un punto muerto, flo porque se hayanterminado las posibilidades de conocimiento, sino porquenuestros recursos paru la investigacin se hayan agotado,porque, por ejemplo, los instrumentos cientficos hayanalcanzado el lmite de una perfeccin que se pueda demos-tt insuperable o porque ( en el caso de la astrorio ma)lleguemos a enconmarnos con fuerzas de las gue , a dife-

  • L6 Inmoduccin

    rencia de la gravedad, no tenernos experiencia teryesffe?Afirmar que no vayamos a arcanzar pronto un punto ennuestro conocirniento de la natur^lezi ri .,rd el intelecto*f:l:.1'J::tf:rr.itu

    -

    iur^ superar, es una suposi_Pero jusrarnente

    :: es1 suposicin Ia luz y lainspira_cin de la investigacin .i.ntfi.u. P";; ri-li ;r*t:inno es cierta, significa- que nunca se puede llegar a verel fin que, en .l-.rro de'la riri.r, ., si no un conocimien-to completo del cosmos y de-io, procesos naturales, slpor Io menos un incornprr1.*.nte mayor y ms profun-do saber que el que ,il;;-;;;;;or.

    Asl, el progreso continuo en er conocirniento humanode su entorno, que es una de las principares condicionesdel Progreso g.n.rd, es ,1, hijtesis que puede ser cier_ta o no' Y si es cierta, quedarla'an"rat;resis ulrerior,la de la

  • 18Introduccin lnuoduccin

    IPuede parecer particularmente sorprendente que los

    griegos , tan frtiles en sus especulaciones acerca de la vidahumana, no dieran con una idea aparentemente tan sim-ple y obvia en nuesma opinin como la idea del Progreso.Pero si tratamos de investigar sus experiencias y el carc-ter general de su pensamiento, dejaremos de pensar porqu. La parte de historia que les era conocida no seextendla demasiado hacia el pasado y, en ese tiempo, nose hab a rcgistrado ninguna serie impresionante de descu-brimientos nuevos que pudieran sugerir bien un aumentoindefinido del saber, o bien un dominio crecienre sobrelas fuerzas naturales. Durante el perfodo en que sus cere-bros ms brillantes estaban ocupados en loi problemasdel universo, los hombres podan mejora r la cosmrccinde buques o inventar nuevas demostraciones geomtricas,pero su ciencia hizo poco o nada paru ffansformar lascondiciones de vid a o para abrir nuevas perspectivas haciael futuro. Los griegot no conocfan hechos rrfi.i.ntementefuertes como paru equilibrar esa profunda veneracin porla antigedad que parece ser connatural a la humanida, ylos atenienses de tiempos de Pericles o de Platn, porms que fueran total y evidentemente encomparacin con los griegos de Homero, nunca tuvieronconciencia de su

  • Inmoduccin Lstroduccin

    cerca de este terna. El mundo fue creado y puesto enmarcha por la Divinidad Y, al ser obra sya, era perfecto,pero no era inmortal y llevaba en sl el germen de laecadencia. Su duracin eta de setenta y dos mil aossolares. Durante la primera mitad de este perfodo, launiformidad y el orden primigenio que Ie fueron gra'bados por el Creador se mantienen gracias a la direc-cin de ste, pero luego se llega a un punto apartir del cual el mundo comenzar, por asl decirlo, arr marcha atrs, La Divinidad pierde su influenciasobre la mquina, el orden se perturba y los ltimosreinta y seis mil aos es un perfodo de gradualdeclive y degeneracin. Al final de este perfodo, el mun'do, abandonado a sl mismo, se disolver en el caos, perola Divinidad volver a tomar el tirnn, restaurar lascondiciones originales y todo el proceso comen zar denuevo , La primera parte de este ciclo csmico correspon-de a la legnd aa Edad de Oro, n la que los hombresvivlan f.eliz y sencillamente. En este momento nos encon-rramos, desichadamente, en algn punto del perlodo dedecadencia.

    Platn aplica esta teorfa del declive al estudio de lascomunidades polfticas. Concibe su utpica aristocruciacomo un estado que existi en algn momento, hacia elprincipio del perlodo de rccada csmic a, ctrartdo las cosasno iban tan mal todava3 y explica su gradual deterioro^

    travs de los sucesivos estadios de la timocr acia, laoligarqua, la democrucia y el despotismo. Platn explicaese deterioro como algo causado, en primer lugar, porla degeneracin de la taza debida a la rclajacin y losemores en la regulacin estatal del mamimonio, 1o queacarce el nacimiento de individuos biolgicamente infe-riofes.

    Las teorlas de Platn son slo el ms ilustre ejemplode la tendencia, caracterfstica de los filsofos griegos, aidealizar lo inmutable como en cuanto provisto de unvalor superior a 1o que vata. Esto afect todas sus espe-

    2Lo*os dioses el papel de promereo. p, prsajes como esre,se puede decir oue existe la idea E- ft. el hombre haprogresado;_1, p9a.*"; ;61n., que ,,nro paru Esqu,ocomo paru.Eurfpides, mas I; ficcioilpi., de una inter-vencin sobren :';ural, existla L .i..l.i, ." un progresonatural. Pero estos reconocimientos J. -,rn progreso noeran incornpatibles con 1a creencia, ampliamente exten-dida, en ,rn, degene rucin de ra ^ii-'tumana en susorfgenes, y. tlmpoco apar,ecra ,rr,rd*.it. como doc*inarival' La vieia ieyend .- un, n.dr--. oro)> sencilla,desde la cual-el hmbt. lrrul^'

    "^rii,=* ,..p tabageneral-rnente como una verdad y los pensador., de ms afiala cornbinaron con r;;;. ri" ;;;rr..rion de rnejo-ras sociales y materiares I d"rrnt. .i. ;;;-;;H;ri.nr.de decadentia. Enconmamos rTh;1il;ombinrr, asf,por ejernpto, en Las Leyes d. phtoil;"' ;;, Iriigu,historia iazonada Je la';iuir.-rn, e*ita por Dicearco,discpulo de Arstt.I., i P;i"a, r.r.illa de aquellaprimera edad en Ia que lor hob;.;-;r;;;" can la ftiga,la guerra y la .nf.rrn. d^d,.ir'.onrid.ruu como er esta_dio ideal en el que .l homr.-J.ria rremerr]r*.nre afortu-nado, caso

    ':,11: p"di.".

    "r. a r. gi hombre habaconseguido, ciertamente, en un remoto tiempo pasadomejorar algunas de las .""ai.itr., de su desdno, perodescubrirnintos tan antigo, - .o*o el i,r.go, el arado,la navegacin o el ,tt.,,a.i.girlrr no sug erlanque nuevasinvenciones pudiesen u;;;'fi"rh.rt.'r-.tndiciones

    enIas que la .uida pudilra ser rns cornpleja pero tan ferizcomo la vida sencila der il;; prirnitivo.Asl pues, aunque pudiei;;d*itir

    ,rn rtirro progre_so, la concepcin g.nrd J. I* ritJroro, -gri.go, era rade que estaban "i"iZ";l :, ;.r;;Hj":vitabre dege_neracin y declive inevitatfg; orq". asl Io pres*iba lanaturaleza del Universo. So l.r.*o, un imperfectoconocirniento de Ias infruye;;;,

    .rp..,rru.in., de Her_clito, Pitgoras y Ernpd;.,- pe.ro _podemos rornar elesbozo de ?ilo i"i^A'i;-dr";J . d;r" -'p^ru itusrrarIas tendencias v-lor-prejuici"r l;i ffiffiiento griego

  • culaciones sociales'.crefan en el ideal 9: ,.q ord"n ,bro-frando el tema desde una perspectiva prctica, r.nrfo qo. ,ruto de ra sociedad s";-;;;;#,;;:,,:^*::n jlj?-'lTd:-:1fii_d..'j"_y::::':1.-::,,ri^li:f1,. :,., ,rg.qo - ;il-e;;,";il,'."",i?1,1T,,j;:,T"ffff_ f,jeHJ,,:*",***;::*;r,*::"X: i":::i,

    '1 posiblf|) Este prejici" ;;-.*; ;.i;b :;ffi;h l.r" r,rmricamente distinto del primero, peio en rodo "* 1t I Ia posibilidad de cn-siderailt-.iririr*rol cotg un movi- lo dems idntico a l y nadie podrra descubrir el nme-L miento ptogtttiuo'-o-q * ffi;?i ni a Platn ni a io del ciclo en el que vivla. como el proceso parecla care-ningrn otro pej

    za,se ^ "*, i:]:i,t.:fl*,r.J,:;1irffiX[il r;,J,,lil:*:,.:;i#rff fr;lrl* lltfrl,: if fii[1:ciones' un orden,sett'tE 191foitr, crearse por medio de Troya y un infinito nmerc de platones escr-ibirlandel acto deliberado t inmtdiato'J.*rnu razn planifica- una infinita cantidad de Repblicas. virgilio usa esra ideadora' ya que eran-a encarnacin de la ruzn.Pdrfa ser en la Egloga Cuatta,en que se refiere a la vuelta a laideado por Ia .abidurfa-ei-iiia;ir1 reverado por ra Edad de oro:divinida. D. ,hr q;i- ;rk;#;" de

    .una ""#rldr Attur erit tum Tipblts et attera quae oebat Argo)testibase tn m'nttnt' i"*',t,Lti'air4. fuera posible , Derectos beoas: eriltt etia.n artera beilaIas instituciones impuestas por .l l.girlrdor iluminado. va Atque iteran ad Troian rtagna mittetur Achiiles.que todo cambio

    i:tri;#fi:r,i*lt'r:ffiilfilJ"i::*:i:J;tfr ,,*,:,i::JHi'ffi*i?:*.r,n:t"xJ:ri* :'lqu. e,i, h-.1,u tiil:,,?::,.i::r:t,'*.;r::l1t*:* :l#fl?,".,l,i**::jT"r$jlnmr::,H",li,j!.cepcionalmente largo, tl tit;;;;:;;bi"iao po, un legis- aada paraestimurar un inters especulativo por el futu-Iador inspirado' q tDlaurc

    ro. conviene recordar que ningn pensador tenla forma2 de saber lo cerca que la hora presente podrla estar del

    Introduccin lnuoduccin 23

    , EI {.qng.,.no, tanto,-era considerado er enemigo de ra Xj i:W'*:' Hr,:]] H:;;:n,t'Jf;:f',':',J'J::ihumanidad' EI verso de'Horacio--..vesvLt la teorra crclica y su efecto psicolgico natural estclara-Damnos

  • 24

    3Y, sin ernbgrgo, uR filsofo estoico viodeclar con

    ,nrair'qul se podfa esperar unsaber en el futuro. t--

    fntroduccin

    clararnente yaurnento del

    inuoduccin 2jiista en La apertu ru paru el filsofo, de una regin divi-aa donde, . En otras palabras, su valor no consistla ., Iotresultados, sino simplemente en la actividad intelectual,r, por tanto, eru vlido no para el comn de los hombressino paru unos pocos individuos escogidos gu, condena-dos a vivir en un munclo miserable, podrln fibrar asle sus almas de la esclavitud.

    Pues la creencia de sneca en la teorfa de la degrada-cin y en la irreparable comupcin de la raza, es induable.La vida humana sobre la iiema se destruye peridica-mente, alternativamente mediante el fuego y -las inun-daciones, y cada perlodo comienza con una edad de oroen la que los hombres viven en rstica sencillez, inocen-rcs porque qon ignorantes, f,o porque sean sabios. CuandodegenerSn de este estado, las rteJ y los inventos promue-ven la degeneracin favoreciendo la lujuria y el i.io.

    Las observaciones de sneca acerca de i* perspecti-vas de futuros descubrimientos cientlficos son int.r"rrrr-res,

    _

    perg aunque sean nicas en la literatura antigaa 6 ,

    estaban lejos de sugerir una doctrin a acerca del Proiresodel hombre. Paru 1, al igual que paru platn y otros fit-sofos ms antiguos, el tiempo-.r Lnemigo dei hombre.

    4Sin embargo, Iubo una escuela filosfica que podra

    haber desembocado en la fundamentacin de ,na teoradel Progreso si la perspectiva histrica de los griegoshubiera sido ms amplia y su temperamenro difere rc."L^teoa atomista de Demcrito nos parece ahota, por variosconceptos, el ms maruuilloso logro del perrrr*i.nto grie-go, pero tuvg poca influencia en Grecia y hubiera iidoan menor de no haber cap-tado la brillante inteligenciade Epicuro. Los epicreos -la desamollaron y p.r.j. serque las ideas que propusieron sobre Ia historiu i. la ruzahumana sean principalmente su propia superestructura.

    .,Hry rnuchos puebros h9y -scr

    ibra {ssa_ queignoran las causas ld.-i;;"..Iiir., JJ'iunr, y sras slohan sido dernos;:*: ffii;oco enrre noso*os. Lregarun dla en qy9 el tiernpo- v d ig;i; hurnana acrararnrnuchos prblernas q* h;i;r u;;;;;r. Dividirnos losecao aos de nuema via Tuy d;;ya'nente enrre elestudio y el vicio, ,"I I" il; anr. ,riLr rnuchas gene-raciones en expliai f.;;ilio, corno Io, comeras. AIgnl' .ll { iTI X?*r ;}x':ffi ilil:'ii,.,,,, i gn oiun ci aCuntos nuevoi anirnales hernos llegado aconocerpor prirnera vez en nuesrro ti.rnp";" ; el futuro, Ioshornbres lreg a* J .ono.., *u.t rI;"; que anosorrosno resultan desconocidas. Ai;d;.r*Lrirnienros

    estnreservados a las edader ?;r;;;r, cuando nuestro recuerdose hava extingriJ; J;- il;;lri, d;-; hornbres. cree_rnos que estarnos iniciado; ;'il; ;;;, de la natura_leza' pero esrarnos tan sro ., pr u*rri. su rernpro.>pero estas predic.ion., ";}.g;;';*.s*ar que sne_ca tuviera Ia rnnor idea ;;, ai;;';;brg

    .i prosre_so de Ia hum anidai. !:: ;i", i.,., f,r" sona.*.r,rruntotalmente una doctrina semejanre ;i t*";i que su visin,profundarnente pesirnisra, ilil asunts humanos. pues,inrnediatamente ^despr, dJ ui. q;;ii''.*r.uffado, seextiende sobre los .ogr.sos .i'rri.il] .,f'*ra, sorpren_dido porque di;; {r.".r ,u., il;;;;;" ha rr.gadotodavu

    ' it'*pft

    "l tartu? Por qu? La-mardad hrnr-na no se ha desarroilado torui*In*. todava.>>;:*':l?r:l;;*j#*tl1::;11{r*;;,:::::iso pudiese apoftff a t^ ,"ii;jH^1:'.XT#,:li:K:-esperaba o"g p"di.r. apofiff ninguna rnejora a*nundo.EI varor d; Ir;;;;; iatwal, .ra. ,,, pirpe*iva, con-

  • 26 Inffoduccin InuoduccinEsos filsofos rcchazaron totalmente la teorla de la Edadde Oro y de Ia corrupcin subsigui.nt., nr. era maHifies-tamente incompatible con su t{orla a. ,i". el mundo sehabla formado hecnicamerr. a pa*ir d los romos, sinninguna intervencin divina. Paruellos, Ia prirnera condi-cin del hombre se asemei aba a la . -io, animales. Apartir de ella, Ios hombre hablan ii^rado laboriosa-mente el estado de la civilizacin

    .*irt.nt., no medianteuna gua externa o como consecuencia de ^lgin-.;ni"inicial, sino simpremente mediante er uso d; I, j;;j;L.r_

    cia hurn ana durnt. ,rl largo p.rrod o, . L^ mejora gradualde su existencia p_arg po; I, hitos d;f descubrimientodel fuego y el uso de ros *.rui.s, Ia iro"n.in der lengua_je y del tejido, el crecimiento de' Ias u.r.r 1 industrias, lanavegacin, el desarrollo de la vida ti*rii^r, el estableci-mienro de un orden social po; medio d; i;, reyes, magis_trados y leyes y la fundacin d. ciudad.r. -H ltimo gtanpaso en la mejora de ra uida, segn Luciecio, haba sidola reveladora filosofa de $i., guien habadeste*adoel miedo a ]ot poderes iniisibres y haba conducido alhombre desde Ia oscuridad .nrd hasta racraridad.Pero Lucrecio y ra escuera a ra que perten eca noesperaban un seguro y continuo progreso de rnejora enel futuro- Crearique it g^iii; momenro en que el uni-verso se convertfua en ruinas 8, pero el perlod int..r.-dio no les interes aba. Co*o ** rrr.r.h, filsofos, pen-saban que su propia firorofir;;; h ;iri-, parabra sobreel universo y no consid.rrbrn - -nosibiriad de que lasgeneraciones futuras pudier an tea;;;;6anres avan-ces en el te*eno der rb". y, eo .rurq,ri.;;r, su perspec-tiva era enreramente individiirrr, todas sus especura-ciones se subord inaban al d"dito de convertir la vidadel individuo T uJgo trn l.rrud.ro como fuera posibleaqul y ahora' Su filosofa,

    .o*o el Ertoi.ismo, era unafilosofa de la resignacin ; era- totalm.nr. pesimisra eincompatible, por lanto, con ra idea .i-progreso. Ermisrno Lucrecio rnuestra ocasionurm.nt. .rrr- sentimiento

    27

    subyacente de escepticismo con respecto al valor de lac:iizacin e.

    De hecho, podrla decirse que en la mente de los anti-guos griegos existla una inclinacin que no les habapermitido admitir semejanre idea con ieriedad, si se leshubiese propuesto. Ningn perfodo de su historia puedeser descrito como una edad optimista. Nunca se sintieroninclinados, a pesar de sus rcalizaciones en atte o litera-tura, en matem ticas o filosofa, a exaltarse en la auto-complacencia ni sintieron la tentacin de poner grandesesperanzas en la capacidad hum ana. El hombre tiene losrecursos suficientes paru afrontarlo todo> rcope zc'oDv pxerar- esto fue cuanto llegaron a reconocer.

    Est_p_ pesimismo instintivo de los griegos tena unmatiz de una aureola religiosa que quizs-hutt^ Ios mismosepcreos nconffaron diffcil de borrar. Siempre sintierong_se b{laban en presencia de poderes desconocidos eicaffitffiret /--q-"itils' pligrs cchao-an las reali--*zaef6iilsI*adq"refciones' humanas. Horacio tom esesEmient-cm"-t -otino e '-rca sobre los pode-res inventivos del hombre. Un viaie de Virgilio le sugie-re la reflexin de que la vida de su amio no estaraexpuesta a los peligros de alta mar si ,rr.u se hubiesellegado a descubrir el arte de nav egar, si el hombre hubie-se respetado sumisamente los lmites impuestos por lanatutaleza. Pero el hombre es audaz:

    N equiquam deus absciditPrudens oceaflo dissociabiliT ercas.

    ( En vano un sabio dios separ las tiemas dividin-dolas con el mar. )

    Ddalo viol el afue al, igual que Hrcules invadiel infierno. El descubrimiento del- fuego nos puso enposesin de un secfeto prohibido. Es prudente o acer-tada esa antinatural conquista de l, nrtrrialeza? Nil mgr-talib,us ardui est: *

    * l.rA bA T-:;

  • 28 fntroduccin

    fj.[m3:f.,n::::tra ningu na haza,a demasiado duraNi siquiera .t .i.ro-lrt libre de. Ias ansias humanas.Nuesrros t.*.rrrio, aH;Tncorerizan a Jpiter.No se atreve a fetenef su trueno.

    Esta oda 10 expresa clararnente cul hubiera sido elsentirniento instiniivo d;-il ine.n d., griegos si seIes hubiese presen tado I, d; rina ;i p*greso. Laideade unos hornbt.tin.Lir;;;. .*o, y

    .onfrontadosf.'ff [:?f ;:l:J:f *Xl**sconocidogin.,i.ui,r.,,

    Este sentrniento o actitud estaba en conexin con Iaidea de Ia Moira. ii- tuvise que sealar-una idea gu,en general, haya controlado'J pin"gado .l pensarnientogriego desde orn.r" rL: r Esroicos u, habrrade seresra idea de ra Moira paru I, .rri .r.*o, de equiva_Iente' su traduc;in' comn por u.inor-., equfvoca. LaMoira suoonfa ,n oriJn.i;"!n

    .t;i;o. pero comohecho ,ni. el ;;i ilr^'lro'rib;:, tenfan que inclinarse,tenla bastante en comn .* I, iu"lo:" paruexigiruna filosoffa de Ia t.tienr;i9;-; paruirnpedir lacreacin#X,Xi1",',r?X :ii-f ,J.'elp.,, nza.br, s re .i *J.n*I;".,X,:',':fl ffit1ff hi?:li:i":Wi#iltrhacia' I u fr .ri...i; ;;; J"'di

    "[' #:t,X]::*:felicidad- h;bi.* Jq" t]'rrirura de los lmites sueseparaban Io hurnano J. Io ir,nl . La;;r;;; lezahr.r,un,no puede sufrir alterucror.q ^.rt ya prefijada por laMoira.

    5

    ,i"rt:"rT, ::,1n"'.::tll.::,0_o, qu ta rnenre especura_qr;;".il il.ffiT5fH:.:T# _t*m ]:uf::,:1, ii*i,,d, ."*fr;:ff fi:il:[H#il:?:Tf ::*'TtF.';;.i,11':""f,'#"::1:'i

    :,'ff*'i j:,*,1,1:s3:i-*-';,'H[.=;il::'i],L#

    lntoduccin 29degeneracin y de los ciclos les sugerlan una visin delmundo que era La antltesis misma de la del desamolloprogresivo. Los epicreos dieron un paso, que podrlahaber sido importante, en direccin de la docmina delProgreso, al descartar la teorfa de La degeneracin y alreconocer que la civilizacin habfa sido creada por mediode una serie de mejoras sucesivas logradas poi el exclu-sivo esfuerzo humano. Pero al llegar aqul se detuvieron.La ruzn es que tenfan la mirada fija en la suerre delindividuo aqul y ahora, y que su estuo de la historiahumana se hall aba totalmente subordinado al inters per-sonal. El valor de su reconocimiento del progreso huma-no en el pasado est condicionado por l rono generaly. 9l propsito de su teorla de la via. La idea . queel hombre no deb la nada a una intervencin sobrenaturaly nada tenla que temer de los poderes sobrenaturales, noera ms que una parte de su dernosacin. Sin embargo,no fue una casualidad que la escuela de pensamiento .se encontr sobre un camino que podrla haber conducidoa una concepcin del Progreso fuera el mayor y ms decla-rado enemigo de la supersticin que Grecia habla pro-ducido.

    Podrfa pensarse que el establecimiento del dominio ydel orden rornanos en una gtan parte del rnundo .ono.i-4o la civilizacin de los pueblor brbaros no podla dejarde abrir a la imaginacin de algunos de los q. reflexio-naron sobre esto en los das de Virgilio o de Srr..u, unaperspectiva hacia el futuro. Pero n hubo un cambio enIas condiciones de vida c paz de sugerir una visin msSpplia

    -

    de -

    Ia existencia hlmana. Cn la prdida de lalibertad, el pesimigm.o se agecent y se sinti ms quenunca la necesidad de las filosofas griegas, d. la r.rig-ry.jqr. Aquellos, que no pudieron satisfcerse con ellai,dirigieron sus pensamientos a nuevas filosoflas mlsticas ya religiones gue estaban poco interesadas por los destinostemenos de la sociedad humana.ensiones hac{a J .r*uit, ,.,, 1;rr::"4-f'l?;irX] TJ.i:

  • IntroduccinIII

    La idea del universo que-prevaleci en Ia Edad Mediav la orientacin general J.l-;;;;;nro humano eranincomp a tibles tonitgrnor ;;. ifr n;;r,iao, fundarnen ra-Ies que requ-ier. ir ;;;;; ;:{ frgr.er. segn ra teoacrisriana, erabor ada por ir irar.r"J. lu lgJesia, y espe_cialmentg qor san s*tii, ; ;;;il del rnovirnientototal de la-historia es asesur ^,

    i^iai;il; ;;;;;eque_a parte der gnero h"*ui;-;n orro *rnjo;;':: f,orrr_la un ulterioi d.rarroflo . lu hi;;";;i,r*rnu sobre latie*a' Paru sa Agustn, .oLt paru todo creyente rnedie_va7' el curso d. Iu"hi-r-tiul.'.rnple;;l^ de rnodo saris-factorio si el *"nio-ir.;;ri-u su^fin .rruor. su propiavida' No estaba intetesr4;p"i

    .l ,.*, J] ,i algunarneio-tla gradual de Ia sociedaJ;Ir; aurnento del sabir podranIlenar el-perfodo J. tier"po ;;..quedabu hurtu .l di, deljuicio. E er ,,rr.*, a sr d;rr,\ *

    ru era cristianaintroduca el ltimo perodo J. d rririr, la veiezde Iahurnanidad, q". a"r irra rorr*.n.r. hasra que Dios pudie_se reunir er nrnero pr"d.rri*" ;;j;r, eregidos. Esrateoa podrfa cornbinarse con I; dif;rdid, *eencia delrnilenio' pero Iu to"tpcin d. .r. perodo no Ia convir-te en una teoa del progr.ro-Todavla,la doct rina;l;val entiende Ia hist oria,nocorno un desarrollo natural,;;; corno una serie de acon_tecimientos ordenador por Ia intervencin divina v lasrevelaciones. si Iu ,rrrrrnidad lrrui.* ;i.i; dejada a supropio arbitrio hubier a a'oibadi u un puerro poco desea-ble v todos lot ]J*ir., h,ruir.n ,rfiido -.1 destino deIa perperua rniseria cl;g; L jnr.ruencin sobren aturalrescat a una rnnorfa. i:;.I..r.i, ;; il providenciapodrfa cornpartirsi

    .o*o d. h;;h.-;.*ri.n una edadposterior, con la cieencia .n .i pld*-*,-d.nrro de un#ffi .:::t*fl pero Ios n9""rrdoi-]l,iar*entares de

    po Jiu- *.#,#iHfr11::' t":,T[,T. rii iT"fl:'; j;

    htroduccin 3Lrc hallase en una suprem acla indiscu tida. Y la doctrinare la Providencia, tal como fue desarrollada en laCiudad de Dios de San Agustln, domin el pensamientoe la Edad Media.

    Adems, existfa la docrrina del pecado original como=n obstculo insuperable paru la m;ora *orrl dd gne-:o humano mediante algn proceso gradual de desariollo.I a que mientras exista la especie hu mana sobre la tierra,ceda nio nacer naturalmente malo y digno de castigo,3or 1o que un avance moral de la humidad hacia larrfeccin es evidentemente imposible.2

    Pero h^y algunos aspectos de la teora medieval cuyaTgnificacin no Po-demos ignorar. En primer lugar, a pesar{e -que mantuvo la creencia en La dlgeneru.r, respal-d,ada por la mitologfa hebraica, abandn la reorla cicli-ca griega. Se reconoci que la historia de la tierra era-ln fenmeno nico en e[ tiempo, no volverla a ,,r..d.,3unca ni n^!? que se le pareiiese. Lo ms importanrede todo es 1 hecho de que-la teologfa crisr iana consrruyuna sntesis gu9 por yr, primeta tla de dar un signifi-cado preciso a la totalida de los acontecimientos h",rmu-nos, una slntesil qu-e represe nta al pasado como algo queileva hacia un fin definido y deseatle en el f,rt,rr. .uvez que se adopt generalmente esta creencia, y despusde haber prevalecido durante siglos, los ho-tr., pai.-ron descartarla junto con la doctrina de la Providencia,sobre la cual se apoyaba, pero no podfan contentarsecon volver a las ideas que hablan satisfecho a los antiguos,pa1ia quienes la historia humana, aprehendida .o-i--""todo, eta una bula insigni ficante ri, Tenan que brr.,una nueva slntesis que pudiese reem plazaa.

    otro rasgo de la teoa medieval, de import ancia parunuestra investigacin , eta una idea que [^ Cristia"autom de los pensadores griegos y romanos. En el ltimoqer9{o de la hisrori

    ^ gn gi, iniciado con Is .o,qri;;,

    de Alejandro M4gno , hab{a emergido la concepcin a.f

  • 32Inffoducci teroduccin 33

    mundo h"t','11"-j:3: *itd y totalidad,la idea de l .rando la idea del progreso hizo finalmente su aparicinunidd del gnero humano' Pod..o, denominarla Ia ide, cn el mundo, se convirti en uno de los elementos de suecumnica *l p.r'r..ipi" di-iiu*"oe o mundo habi Jesarroro.tado en "ontrrpori.i;-;;i Zi^ paro ciudad. Fomentada pot Ia vasta exrensin d;l;; Ilmites geogrficos de )mundo griego-resultd; dt-t;nquistas dJ Ahandr, Especial consideracin merece un hombre norable, ely de su ooll",;lJ!i*itiis*:f:q::'::'::,,:i:'.*i:'t::iJ ;#'iJ;,.H,1",#,ifrf;:::;iitrut*t*tna estoica de que- todos Ios h;;.. son hermanos y qu ide-a del progreso e incluso se le ha llegado a compararIa verdadera ptrit dt uiffii;f ;" es su propia ciudac .-on condorcer o comte. Tales interpretaciones se basanparticular' sio Ia

    "'u;;;;i;'"itia ily pronto devinc =o determinados pasajes aislados de su conter

  • 34 Introduccin

    daridad de las ciencias, con lo que se anticip a teorlasposteriores,

    s una de sus dos afhmaciones principalespor las que merece ser recordado. En ella se basa elOpus Maius y an hubiera quedado ms perfectamenteelabor ada si hubiese vivido lo suficiente paru terminarla obra enciclopdica Suip,turu Principale que comenz aescribir poco antes de su muerte. Su reg,rndo derecho ala fama es bien conocido. Fue el primero en darse cuentade la import ancia del mtodo experimental paru investi.gff los secretos de la naturaleza y fue pionro casi soli.tario en los caminos sobre los gue, tre'scientos aos des.pus, habra de llamar la atencin del mundo su gtanhomnimo.

    Pero aunque Roger Bacon estuviese inspirado porestas ideas iluminadas, aunque rechazase m,rihor de

    -los

    prejuicios de su tiempo y se rebelase audazmente contrala thanla de la preponderante filosoffa escolstica,

    rotros qspectos no dej de ser un hijo de su tiempo, y ncpudo desemb arazarse de la concepcin comiente -del uni.verso en la Edad Media. Su concpcin generat del curscde la historia humana no diferf esencialmente de lede

    -

    San Agustfn. Cuando dice que el objeto prctico detodo conocimiento esmiba en asegurar la saivacin degnero humano, explica a continuacin que ello ha deinterpretarse en el sentido de cosas que conducen a 1,,felicidad en la offa vida>.

    Conviene sealar que no sIo crefa en la asuologfacuya creencia eta universal en aquel tiempo, sino que 1,"consideruba una de las paftes ms imprtanres . la:> . La astrologa no eta bien vista por ltIglesia,_ gu la consideruba una materia peligrorr. ^Bu.o,ril embargo, defenda su uso en inters d; la Iglesirmisma. M?rtena, como Santo Toms de Aquin , binfluencia fisiol gica de los cuerpos celesres y ctnridemba los planetas como signos qu nos dicen I; que Dio,ha decretado desde toda la etrnidad, que debe sucederya mediante procesos natutales, ya midirnt. actos dtla voluntad humana, ya mediant su buen deseo. Lo,

    --=oduccin 35

    iluvios, las plagas y los terremotos podlan ser previstos, igua *oo [ue

    -las revoluciones

    ,polticas-- y religiosasa h[aban insciitas en el curso de las estrellas. La exis-::ncia de seis religiones principales estaba determ inadacr las combinacioes de jpiter con los otros seis plane-;. Bacon, basndose en l prediccin de un asulogoiabe, esperaba con toda seridad la extincin de la reli-;n mahometana antes del fin del siglo XIII.

    Una de las enormes ventaias que el estudio de la:encia astrolgica apo*aa a la humanidad serla

    -Q9e,3or su mediacit, se podrfa fiiar con exactitud la fecha

    f . .,:3 apanoon del Anticristo y asl la Iglesia podrla prepa-:arse paru afrontar las pruebas y los peligros de ese terri-ble prfodo. La llegada del Anticristo equivala al finjel mundo y Bacon aceptaba la opinin, compartida, segn, por todos los hombres inteligentes, d. que , Por ello, las:eformas intelectuales que consideraba necesarias, ten-lan el efecto de preprar, nada ms, a la Cristiandadsara que resistiese con mayor xito la comupcin en gue.l reino del Antimisto sumirfa al mundo .

  • 36

    los errores de los primeros .pensadores. Avicena y Ave-moes corrigieron a su vez a Aristteles en mu.h; i.rnro,1-y le aadieron muchas cosas nuevas, y as ser hasta e]fin del rnundo. Bacon :y^ rtg,rno, pasajes de ras Inuesti_gaciom'es Fsicas de Sneca "a fin- ;'-*orrrarnos quela adquisicin del rrb.r .J grlar;i.- yr-fr.*o, Ilamado Iaatencin sobre esos pasajes i

    ^1 tiempo-q;. hemos seala-do hasta qu

    -punto es -

    equivocad brlm sobre e[os raidea de qe Sneca d.;;; rnaesffo de la teorfa delProgreso. paru Bacon se ha ,..rr*;a; ;, honor seme-jante, con mayor segurid ad an, pero eflo no deja de ser,T1 equivocacin . La idea del ProJ ;; evidenremenremcongruente con su concepcin deI rnunJo. Si se hubieseaceptado su- pro grama paru revolu.i;; h ensea nzalaica

    -gue fue ,6rndonio;. iguai -;; que sus escri-tos quedaron olvidados durrnt. mu.hos fiss- habrlasido auror de una r.{orm, prr.riur, pero cuntos reforrnadores no ha habi{", rl: ;.b;J."Bacon en cuyasmenres nunca apareci ra ide de rogr.*i4

    As pues, Ias teorfas baconianas de reforma cientlfica,Iejos de ser una antcipr.in-t. U - ia.r" a. progreso,mues*an hasta que- punro era imposiLi.-q.r. semeianreidea apareciese .n li naa M.J -i;; :i-.;?irlr".la cristiandad medievd .*.iiir. L;.on..pcin respec_to del funcionarniento d. Ir-P;;;i.n.ir-Jiuinu

    , l^creen_cia en que el rnundo, jorprendid ;;;^,r, hogar porun ladrn nocturro, p;di;;; ., .lrr;;;omento llegara su repentino in, tuvieron er *irrro efecto que lasteoras griegas de la naturaleza- d.i ;;bi; y los ciclosrecurrentes del rnundo. O rneiot di;h";;;;i..on un efectoms poderoso todava, yd que no eran concrusiones tazo-nadas sino dogma, grr.rtizados pgr I, ;;;;ridad divina.Y el pesimit*

    'n.d.u;i-;;;i a. h ;;icin rnunda-na del hornbre eta at3n *,r, n.gro y rns severo que elpesimismoi^nz^ de r.fl:r#:

    -J':T; :frji1if ',,m k:;ft;

    Introduccin t-=oduccin 37

    menos probable La posibilidaddestino del hombre sobre la

    .,, imaginacin, hacla an"E especular acerca del:]rra.

    ilI;.

    Los pafses civilizados de Europa emplearon unos tres-dentos aos paru pasar clel clima mental del Medioevoi del mundo moderno. Esos siglos fueron uno de los:erodos ms claramente progresivos de la historia, pero.

    .l . .

    -as condiciones tampoco fueron avorubles paru la apa-in de una ide del Progreso, aunque se estaba prepa-:ando el rnilie- intelectual propicio paru el nacimiento& esa idea.

    Este perfodo progresivo, que adecuadamente se hadenominado Renacimiento, dur desde el siglo XIV hasrael XVII. Los mayores resultados significativos paru nues-lro presente propsito, a los gue lleg la mente humanaen este estadio de su evolucin fueron dos. Se restaurla confianza en la ruzn humana y se reconoci que larida en este planeta posela un valor independiente dearalquier temor o espera nza relacionados con una vidaultrateffena. s .

    Pero paru abandonar la naiuet y Ia supersticin medie-vales, paru asumir una actitud ms libre respecto de laautoridad teolgi ca y paru desamollar un nuevo, conceprodel valor de Ia personalidad individual, Ios hombres rcr-rrieron a la gula de los pensadores griegos y romanos yresucitaron el espritu del mundo antiguo paru exorcizarlos fantasmas de las edades oscuras y uistes. Se volvie-ron asl hacia una civilizacin pasada que entron izaroncomo un ideal en su ardor por los nuevos descubrimientosy en su reaccin antimedieval, con lo que apareci unanueva fuente de autoridad: la autoridad de los escritoresde Ia Antigedad. En general, los pensadores del Renaci-miento siguieron las tendencias y adoptaron muchos de

  • 38 Inttoduccin l:=oduccin )g

    los prejuicior d. ,:^lrt:ofla gtiega. { p.rrr. dg eue en ?aan tenido siempre las mismas pasiones, y por lo tantoeste perlodo tuvieron.lugm girn., der,"lrurimientos de ,"s efectos deben ser necesariamente los mismos.consecuencia, *"",1::l:l{i , largi- plazo, Ia mayor __ }faquiavelo se inspir tambin en sus maestros departe de las inteligencias actrvas ,. o".up.ro, en redescu- } -{ntigedad al dar por sentado que- una buena orga_brir, eraborar,

    .ri"ti.o..];i;;1":;lriguo. Hrrtu Io, _aande la sociedad sro puede ser fruto del designioltimos aos del R.nr.i,ni.no j. p*rir.rn no empez ir:gsdo de un sabio legislador. Las formas de gobierno,a buscar el camino hacia nuevos puntos-de partida, 'Slo x .o*o las religiones son geaciones per,qstgs de unaentonces apareci una reaccin 'i. .nt', ir;;; ;;; I.irriiail;Ji;iil;t;y ,ini., posibilidad de que unafundas infiuencias d.l ;*;;;i."#.!it.

    _ena constitucin o una religin se mantengan por algn2 Apo, consiste en la repreiin constante de cualquier

    para ,usffar las limitaciones de este perlodo, tome-

    =rr.#:"

    a arejarse de ros designios originares de sumos a Maquiavelo',uno, d. tot rnt oriiin.t., escritores Es evidente que ambos principios estn lgicamenten**'l':I? prodr:cido nunca' -

    =oectados. El legislador construye sobre la inmutabili-En Ia base de la .ciencia polltica de Maquiavelo hav d de la natwalza humana: lo que es_bue19 para unadeterminados orincipios, s;i;I;, ru'pffirar astil :eoeracin debe serlo parulasiguiente. ?ara Maquiavglg,asistemdco, indic-de prrrar-i.rJ';;;

    ,"n esenciales :ral que para Platn, ."rio--'.quiuala.a.orr,rp"ia,pam7acomptensindei,".'ii"^'HI'o,i-",.,esdtIa.ffi"n.iaclulacu1Qiei;#b::].:y:d" di los seres h'-"';t;;#r#ill1iau'i,Hl *ll;; ;;; u,, od.,, ,*i,T-,,ti'?,.t*i, ;il. brotraunque varle de un pals u 9t{o,- t q;; ;;:t*ra siempre g.o".trnl",. el trabaio impersonal de generaciones suce-el mismo aspecto: urrr, ,o.i.dr ;: n^iun

    ^n hacia la ,-* q". ^d"pirrgn ,r, inrtitrrcion.r, i* propias y cam-

    fi:3xliiiffT:fl:'j,':*,ii;:##;+.,T:,"T ;:ll',urni*;',::iy:ffit!1,ff"i:;T:i::?".1:i:a*::r-"i;:iryfl:'"::":T,ffilTlp.',';# fl'ff?dii.*:':',:'_":"0"

    idear en er pasado: ra

    fl:,^iflilnt.*to. y deben- ir,. por tanto, hacia arriba o . -stas^doctrinas, la idfntidad de Ia naturaleza humananacn-abalo. De igual modo, Ioi .rtrdo, .n decli.. ll^-^ t la omnipotencia del legisladot, no dejaban resquiciorn finalmente a tocar f"il;;;#;1Tli:'"jl'i1- ,rsil;ur "",

    l."ir" d.t"p'og'o. sg b" selad conascensin. Asl pues, un, bu.nJ .;ild. :azn que es-tas ideas *. .n*.nirrn en la base de algunascin-soci'l.slo pude d".;;;;';i#;::" u otganlza- le las ms famosas especulaciones del siglo XVIIII aunL':s obvio que Maquiav.lo fr. il;i;" lo no en la forma rotunda en que Maquiavelo laspo' Io';;;is"#.r"li,

    .on..p.ion de Ia n,rr.i,ilillti* --311,,u.premisas se segula eue.9l .riii" .ip;ril:.r" del mis_ lmo valot porque permita al hombre ;;i:t. Io porve- La identidad de ra naturarezahumana significaba, parali':i.l!Xn'""i0".'r':il':ffi;.'H'l;n,:X'h;.,i,'en" M.fii"uero,.que er homb.re tendrr ,iempie las mismasaconreci;ien,o,',o1", d.i;,";l;i::.Ii,.:T:*T :,x,,Ti.i,i$,,fr:fl,..1T;rl,.ii:,.x,"if,,**:,:J

  • 40Intoducci hacduccin 4L

    ampliamente extendida, ,f: qr. el hombre habla degene, pero la tendencia eciente a desafiar la autoridadrado en el curso d

    .,. r, .au;," ,qi!:ilfl::"ti.'ll,:*rj#,3'rLT*['J:ifJr,fl?*:',?,.#y:,,1*.txl'jHi:HAntigedad erieoad,d";;;#br,i,I:#.{1fi,:"i:.:,::1j.,**:

    -ljL.",ffl:i.T;1.,ffi1Tj,"H.,*itr,m-:f*cimiento' si los giiegos. grgn "toiial en filosofla y en .,r eberla ser el dueo de su propio desrino, afirmarcrenctas' si eran inigualables t-"- ;,rteratura, si la

    = libertad en el campo de la literatura y del arte, fueRepblica romana-

    iFiptd"ill':iiTfljfii"3:'J.'.t'1i(# -.Tf*#:1.j.*:il,H'..1xfi#::fx"*t*f?tcerebros j. uii," j,::,;'JiJ,aL fi!,?,fi:T:i

    =,1",:..,.,ffi:iuxi,nn#,:,jli"1"#.il,f,fuT:I;X[-dd;rfUf-""1'i"l'11'J'i"'a.rrpr]."i.-* #i ra sorun menos ortodo-xa y m4"comple. La, .$,u?#:;]ij:.g:::l3sro- xvr, si bien ttmida flltffl *n1L*,u"fi:,L*,*"tfmx,.o,ro,::ontr, tr-iir*ir'il'l; f.",ff.,':^-re!Pezargn a rebelarse --"lquier ,rtoridrd externa. Pero orros pensadores de la;l'*:ffi"'ffif:t'"':,1i1*l::.-.:?? ;.:l'lil #f;,1:l'i"Ti',l,'ff;";'#iffi:[:ffi'Ti:"Jil:**.it f:lH* l.jrF:,,:,_d::i,...i,::,ffi:,1,:" ;.y"X,L.,,*r,ff,::,*Jfil,:t'?i,m:t"*tinvestigacion.,

    "n,,i*, ji,,Ij,,iT"#,.*...[:i,jij ]H*:j:Jil;#::,tilTf,ltj:,r#nr,*.i:x.,*de Galeno, Aristt"lpor Telesio, Crrar"--"11,-'::T:o en dlter-entes puntos Giordano Bruno y la sobriedad de Francis Bacon se hallan

    ir=!.1,;;*"1'11ff ;H:#T,3!;.;,ffil5=T*{,#,1"r,,'""Ti,';I*".,','#irfr :T.ffi .ilfenmenos naturales' unq" ti ,igniri"ri"'gene.al d. Iu, conviene sealar que habfa un sentimiento generalpetspectivas que abrvagamenre atisbado #":::,,:"es-tigaciones era tan slo - ."lfr...;;.up.* a la necesidad de aprendery los hombr.r d. .i.i". EYsLvD temPos' Los pensadores t a los objetivos intelectuales. Rabelais er

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    En esra rtirna frrg der Renacirnienro, gu incruyeel primer cuarto del siglo *vfi, se esraba preparando elterreno en el cual g.iminmii-^-;;-i.l progreso. ynuestra historia de tirr orfgenes corni.nrr-.on el ttabajode dos hornbrgr q;; perrenecen a esre tiernpo: Bodino,apenas conocido rns qr. por Io, especiaristas en cienciaspollticas' y B3con, -"ot*ido - roo* arnbos tuvieronuna rns amplia cornprensin de la significacin de supropia poca que tulq"i.r-r' aI' sus conternporneos yaunque ninguno de lor',r;;--.f," una ftorla del pro-":i'"T,?:'.:?ffifr'ffi::,i*;r' b ";; #:; " d : ;siguiente- v4v \rrsLtarrenfe en u aparicin sub-

    42Introduccir

    f,XTiT::*T:,::i.l -,_,ber

    junto con tasuserencia de[T;.'l#.ffi ;,i :,,] *; ;;ffi;;,# ;:ffi.fii1#f*:J"i,iil'*Tii:;"rv,,"':idA',"':Ji:T3,J'311,Jl:'::" il*:, :,r1i .,:[";r::ff;iff':. ffi#i:que