Hoja Dominical n. 3707 del 28-03-21 · 2021. 3. 26. · con motivo del vigésimo quinto aniversario...

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Arzobispado de Tarragona www.arqtgn.cat n. 3.707 Carta Dominical dominical HOJA U na semana más, glosamos y comentamos aquellos rasgos más esenciales a la pregunta que nos hacemos los obispos, en el documento Espíritu, ¿hacia dónde guías nuestras Iglesias?, con movo del vigésimo quinto aniversario del Concilio Tarraco- nense. En el intento de respuesta, debemos decir que el Espíritu nos guía hacia una Iglesia que ora y celebra la fe. Precisamen- te, los obispos en el apartado que dedicamos en el documento sobre el Pueblo de Dios que comunica el Evangelio, decimos: «Todos los bauzados, incorporados a la Iglesia como pueblo de Dios, son discípulos de Cristo que perseveran en la oración y el tesmonio». Y añadimos: «La Iglesia es el Pueblo que Dios ha reunido [...] para formar la comunidad de fe y de amor que alaba la Trinidad santa, de modo que se convierta en el pueblo sacer - dotal sanficado por la Palabra y los sacramentos, sobre todo la Eucarisa, constuva de la Iglesia, y viva un amor universal y concreto en la persona de los más pequeños». Y, más adelante, haciéndonos eco del magisterio de san Juan Pablo II, afirmamos: «“Nuestras comunidades enen que llegar a ser auténcas es- cuelas de oración” (Novo millennio ineunte, 33)». Además, de constatar «la presencia de realidades de grupos de oración y de adoración en nuestras Iglesias», los obispos subrayamos que «la Palabra de Dios debe tener un papel fundamental en toda ora- ción auténcamente crisana». De ahí que «recomendamos que en las parroquias, en la medida de sus posibilidades, se celebren comunitariamente y en la Iglesia las principales oraciones de las Horas». Quienes somos seguidores de Jesucristo podríamos explicar nuestra personal vivencia sobre la propia manera de orar. Hay quien lo hace como la cosa más natural del mundo y quien lo consigue a duras penas. Hay quien lo pracca de manera espo- rádica y quien se ejercita de forma regular. Hay quien lo vive en solitario y quien lo comparte con otros; quien ora en silencio y quien se expresa en voz alta; quien reza con palabras espontá- neas y quien recurre a formas estereopadas. Hay quien nece- sita aislarse de todo y quien prefiere sumergirse en el ruido co- diano. Hay quien se acoge a horas y lugares convenidos, como la parroquia, en la liturgia comunitaria de las Horas, o espacios de adoración del Sansimo Sacramento..., y quien aprovecha los momentos más inverosímiles: cocinar, pasear, ir en coche, mirar por la ventana... Hay quien ora temprano para ofrecer el día y quien lo hace de noche para poder dar gracias. Hay quien sien- te la oración como una fuente de paz y quien encuentra en ella un esmulo para seguir adelante. Hay quien encuentra a Dios y quien, de paso, se encuentra a sí mismo. Lo importante es que el Espíritu nos guíe a la oración confiada y sincera. En este pórco de la Semana Santa que es el domingo de Ramos, pidámoslo de todo corazón al Señor y, a pesar de la pandemia, procuremos llevarla a la prácca especialmente en estos días santos. Que nuestra oración esté siempre impregnada de la Palabra de Dios, para que, como Cristo, podamos «vencer la soberbia del enemigo» y «celebrar el misterio de nuestra re- dención» (Prefacio del domingo de Ramos). Finalmente, en cuanto a mí, debo confesaros que me encuentro muy reflejado en lo que se expresa en el poema de un buen ami- go y poeta. Dice así: «No siempre la plegaria me llega muy aden- tro: a menudo es runaria, escépca, cansada, tediosamente cargada de costumbres y desengaños. Pero rezo cada día, enla- zando un día con el otro con este hilo de palabras tenaces, de de- seos perseverantes, de fracasos superados, con el resplandor de una luz que me impactó para siempre y que aún me acoge» [Da- vid Jou, Poemes de Nadal i de Setmana Santa (traducción libre)]. ¡Santos días! 28 de marzo de 2021 Domingo de Ramos LO IMPORTANTE ES QUE EL ESPÍRITU NOS GUÍE A LA ORACIÓN CONFIADA Y SINCERA † Joan Planellas i Barnosell Arzobispo metropolitano de Tarragona y primado Enfoca el código QR y accede al video de la Carta dominical «Espíritu, ¿hacia dónde guías nuestras Iglesias?» (9) UNA IGLESIA QUE ORA

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Arzobispado de Tarragona www.arqtgn.cat n. 3.707

Carta Dominical

dominicalHOJA

Una semana más, glosamos y comentamos aquellos rasgos más esenciales a la pregunta que nos hacemos los obispos,

en el documento Espíritu, ¿hacia dónde guías nuestras Iglesias?, con motivo del vigésimo quinto aniversario del Concilio Tarraco-nense. En el intento de respuesta, debemos decir que el Espíritu nos guía hacia una Iglesia que ora y celebra la fe. Precisamen-te, los obispos en el apartado que dedicamos en el documento sobre el Pueblo de Dios que comunica el Evangelio, decimos: «Todos los bautizados, incorporados a la Iglesia como pueblo de Dios, son discípulos de Cristo que perseveran en la oración y el testimonio». Y añadimos: «La Iglesia es el Pueblo que Dios ha reunido [...] para formar la comunidad de fe y de amor que alaba la Trinidad santa, de modo que se convierta en el pueblo sacer-dotal santificado por la Palabra y los sacramentos, sobre todo la Eucaristía, constitutiva de la Iglesia, y viva un amor universal y concreto en la persona de los más pequeños». Y, más adelante, haciéndonos eco del magisterio de san Juan Pablo II, afirmamos: «“Nuestras comunidades tienen que llegar a ser auténticas es-cuelas de oración” (Novo millennio ineunte, 33)». Además, de constatar «la presencia de realidades de grupos de oración y de adoración en nuestras Iglesias», los obispos subrayamos que «la Palabra de Dios debe tener un papel fundamental en toda ora-ción auténticamente cristiana». De ahí que «recomendamos que en las parroquias, en la medida de sus posibilidades, se celebren comunitariamente y en la Iglesia las principales oraciones de las Horas».

Quienes somos seguidores de Jesucristo podríamos explicar nuestra personal vivencia sobre la propia manera de orar. Hay quien lo hace como la cosa más natural del mundo y quien lo consigue a duras penas. Hay quien lo practica de manera espo-rádica y quien se ejercita de forma regular. Hay quien lo vive en solitario y quien lo comparte con otros; quien ora en silencio y quien se expresa en voz alta; quien reza con palabras espontá-neas y quien recurre a formas estereotipadas. Hay quien nece-sita aislarse de todo y quien prefiere sumergirse en el ruido co-tidiano. Hay quien se acoge a horas y lugares convenidos, como la parroquia, en la liturgia comunitaria de las Horas, o espacios de adoración del Santísimo Sacramento..., y quien aprovecha los momentos más inverosímiles: cocinar, pasear, ir en coche, mirar

por la ventana... Hay quien ora temprano para ofrecer el día y quien lo hace de noche para poder dar gracias. Hay quien sien-te la oración como una fuente de paz y quien encuentra en ella un estímulo para seguir adelante. Hay quien encuentra a Dios y quien, de paso, se encuentra a sí mismo.

Lo importante es que el Espíritu nos guíe a la oración confiada y sincera. En este pórtico de la Semana Santa que es el domingo de Ramos, pidámoslo de todo corazón al Señor y, a pesar de la pandemia, procuremos llevarla a la práctica especialmente en estos días santos. Que nuestra oración esté siempre impregnada de la Palabra de Dios, para que, como Cristo, podamos «vencer la soberbia del enemigo» y «celebrar el misterio de nuestra re-dención» (Prefacio del domingo de Ramos).

Finalmente, en cuanto a mí, debo confesaros que me encuentro muy reflejado en lo que se expresa en el poema de un buen ami-go y poeta. Dice así: «No siempre la plegaria me llega muy aden-tro: a menudo es rutinaria, escéptica, cansada, tediosamente cargada de costumbres y desengaños. Pero rezo cada día, enla-zando un día con el otro con este hilo de palabras tenaces, de de-seos perseverantes, de fracasos superados, con el resplandor de una luz que me impactó para siempre y que aún me acoge» [Da-vid Jou, Poemes de Nadal i de Setmana Santa (traducción libre)].

¡Santos días!

28 de marzo de 2021 Domingo de Ramos

lo importante es que el espíritu nos guíe a la oración confiada y sincera‘

† Joan Planellas i BarnosellArzobispo metropolitano de Tarragona y primado

Enfoca el código QRy accede al video de la Carta dominical

«Espíritu, ¿hacia dónde guías nuestras Iglesias?» (9)

UNA IGLESIA QUE ORA

Page 2: Hoja Dominical n. 3707 del 28-03-21 · 2021. 3. 26. · con motivo del vigésimo quinto aniversario del Concilio Tarraco-nense. En el intento de respuesta, debemos decir que el Espíritu

Edita: Arzobispado de Tarragona · Redacción y administración: Dpto. de Comunicación y Publicaciones (Pla de Palau, 2 – 43003 Tarragona) · Teléfono: 977 23 34 12 · Correo electrónico: [email protected] Directora: Anna Robert · Asesoramiento lingüístico: Rafael Muñoz · Imprime: Torrell, S.A. · D.L.: T-519-01

Ciclo B

Liturgia de las Horas: Semana II

Domingo 28: Domingo de Ramos [Is 50,4-7; Salmo 21,8-9.17-18a.19-20.23-24; Flp 2,6-11; Mc 14,1-15,47 o bien más breve: 15,1-39 (LE/LH propias)]

Lunes Santo, 29: [Is 42,1-7; Salmo 26, 1.2.3.13-14; Jn 12,1-11]

Martes Santo, 30: [Is 49,1-6; Salmo 70, 1-2.3-4a.5-6ab.15 y 17; Jn 13,21-33.36-38]

Miércoles Santo 31: [Is 50,4-9a; Salmo 68,8-10.21bcd-22.31 y 33-34; Mt 26,14-25]

Jueves Santo, 1 de abril: Misa de la Cena del Señor [Éx 12,1-8.11-14; Salmo 115,12-13.15-16.17-18; 1Cor 11, 23-26; Jn 13,1-15] Después de la Hora menor (Nona) se acaba el tiempo de Cuaresma y empieza el Triduo Pascual

Viernes Santo, 2 de abril: Celebración de la Pasión del Señor [Is 52,13-53,12; Salmo 30,2 y 6.12-13.15-16.17 y 25; Heb 4,14-16; 5,7-9; Jn 18,1-19,42] Día de ayuno y abstinencia

Sábado Santo, 3 de abril: [Durante este día la Iglesia permanece junto al sepulcro del Señor y se abstiene de celebrar la Misa (LH propia)]

Domingo 4 de abril: Domingo de Pascua de Resurrección del Señor (Sol) [Vigilia Pascual: 1L) Gén 1,1-2,2 o más breve: 1,1.26-31a; Salmo 103,1-2a.5-6.10 y 12.13-14.24 i 35c o bien: Salmo 32,4-5.6-7.12-13.20 y 22; 2L) Gén 22,1-18 o más breve: Gén 22,1-2.9a.10-13.15-18; Salmo 15,5 y 8.9-10.11; 3L) Éx 14,15-15,1a; Salmo Éx 15,1-18; 4L) Is 54,5-14; Salmo 29,2 y 4.5-6.11 y 12a y 13b; 5L) Is 55,1-11; Salmo Is 12, 2-6; 6L) Bar 3,9-15.32-4,4; Salmo 18, 8.9.10.11; 7L) Ez 36,16-17a.18-28; Salmo 41,3.5bcd;42,3.4; o bien: Salmo 50,12-13.14-15.18-19; 8L) Rom 6, 3-11; Salmo 117,1-2.16ab-17,22-23; E) Mc 16, 1-7. Misa del día: Hch 10, 34a.37-43; Salmo 117,1-2.6ab-17.22-23; Col 3,1-4 o bien: 1Cor 5,6b-8; Jn 20,1-9 o bien: Mc 16,1-7. Misa vespertina: Igual que la del día, pero se recomien-da leer el evangelio: Lc 24,13-35 (LE/LH propias)

LecturasDomingo de Ramos

Lectura del libro de Isaías (50, 4-7)

El Señor Dios me ha dado una lengua de discípulo; para saber decir al aba-tido una palabra de aliento. Cada ma-ñana me espabila el oído, para que escuche como los discípulos. El Señor Dios me abrió el oído; yo no resistí ni me eché atrás. Ofrecí la espalda a los que me golpeaban, las mejillas a los que mesaban mi barba; no escondí el rostro ante ultrajes y salivazos. El Señor Dios me ayuda, por eso no sentía los ul-trajes; por eso endurecí el rostro como pedernal, sabiendo que no quedaría defraudado.

Salmo responsorial [21, 8-9.17-18a.19-20.23-24 (R.: 2ab)]

Al verme, se burlan de mí, hacen visajes, menean la cabeza: «Acudió al Señor, que lo ponga a salvo; que lo libre si tanto lo quiere».

R. Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has abandonado?

Me acorrala una jauría de mastines, me cerca una banda de malhechores; me taladran las manos y los pies, puedo contar mis huesos. R.

Se reparten mi ropa, echan a suerte mi túnica. Pero tú, Señor, no te quedes lejos; fuerza mía, ven corriendo a ayudarme. R.

LITURGIA DE LA SEMANA

Contaré tu fama a mis hermanos, en medio de la asamblea te alabaré. «Los que teméis al Señor, alabadlo; Linaje de Jacob, glorificadlo; temedlo, linaje de Israel». R.

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Filipenses (2, 6-11)

Cristo Jesús, siendo de condición divi-na, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios; al contrario, se despojó de sí mismo tomando la condición de escla-vo, hecho semejante a los hombres. Y así, reconocido como hombre por su presencia, se humilló a sí mismo, he-cho obediente hasta la muerte, y una muerte de cruz. Por eso Dios lo exaltó sobre todo y le concedió el Nombre-sobre-todo-nombre; de modo que al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo, y toda lengua proclame: Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre.

Pasión de nuestro Señor Jesucristo según san Marcos (14, 1-15,47)

No se publica debido a su larga extensión

Conmemoramos hoy la sagrada entrada de Jesús en Jerusalén, montado sobre un borrico. Con este acto de humildad, nos muestra así el camino de su rebajamiento que le llevará hasta la muerte, una muerte en la cruz (2a lectura). Así mostró al género humano el ejemplo de una vida sumisa a la voluntad de Dios. Se lee hoy la Pasión según san Marcos, cuyo tema central es el de Jesús como Hijo de Dios, el Siervo de Dios mártir, vaticinado por Isaías (cf. 1a lectura), que muere en la cruz. Este sacrificio se actualiza en la eucaristía, en la que hoy pedimos la misericordia que no merecen nuestros pecados.